La vida privada de Andy Byron, ex CEO de Astronomer, se convirtió en un tema de interés global tras revelarse su presunta infidelidad con su colega Kristin Cabot. El asunto se volvió viral luego de que el nombre de la banda Coldplay apareciera vinculado indirectamente al caso, disparando la atención mediática y las especulaciones en redes sociales.
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Megan Kerrigan, la esposa traicionada, reaparece
Megan Kerrigan, esposa de Byron y madre de sus hijos, mantuvo silencio durante varios días tras el escándalo.
Según el diario británico Daily Mail, su primera reacción pública fue eliminar el apellido de casada de su perfil en Facebook, para luego desactivar por completo la cuenta.

Ahora se sabe que Kerrigan, de 50 años, se habría refugiado en una mansión familiar en Maine, valorada en 2.4 millones de dólares.
Esta propiedad está ubicada a 106 millas de Northborough, Massachusetts, donde vivía anteriormente. Por otro lado, el medio Newsweek sostiene que la familia tiene residencia en Nueva York.
Conversaciones privadas sobre la crisis
El reporte también indica que Megan ha iniciado conversaciones sobre su crisis matrimonial, en particular con su hermana mayor, Maura, y otros familiares cercanos.

Aunque no ha emitido declaraciones públicas, su entorno confirma que atraviesa un proceso complejo de reflexión y posibles decisiones legales o personales.
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La relación entre Byron y Cabot sigue generando eco
Mientras tanto, ni Andy Byron ni Kristin Cabot han dado declaraciones oficiales. El vínculo laboral entre ambos y su conducta dentro de la empresa han levantado dudas éticas que podrían tener consecuencias más allá de lo personal.
Este caso, que mezcla amor, traición, poder corporativo y viralidad mediática, sigue desarrollándose con impacto público, y todo indica que la historia está lejos de concluir.