A veces, las historias de éxito se cocinan a fuego lento. Otras, como la de Murrah, explotan con fuerza y sabor. Esta hamburguesería ubicada en Cumbayá se llevó el galardón a Hamburguesa Revelación del Burger Show 2025, gracias a una propuesta que une la gastronomía consciente con el poder de la innovación.
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La chef Lilibeth Zambrano lidera la cocina de Murrah, un proyecto soñado por su fundador, quien es veterinario. Desde su pasión por el cuidado animal y la tierra nació una idea osada: presentar la primera barra de hamburguesas de carne de búfalo en Ecuador. “No sabíamos si funcionaría, pero apostamos por lo artesanal, el respeto al proceso y la calidad de cada ingrediente”, cuenta Lilibeth.
Una hamburguesa con historia
La hamburguesa ganadora fue desarrollada con la receta del chef argentino Luciano Gobi. Se trata de una carne dry-aged de 200 gramos, con una mezcla de 75% carne de búfalo y 25% grasa de wagyu. El pan, hecho de papa con manteca clarificada de búfalo, completa un viaje de sabor que incluye burrata rellena de stracciatella, tomates cherry, escabeche de hongos y albahaca fresca.
Todo en Murrah sigue el principio del slow food: productos elaborados con tiempo, conciencia y respeto. “Queremos que la gente venga, se relaje, y disfrute de verdad. A veces una hamburguesa no tiene que ser rápida, sino memorable”, dice la chef.

Murrah en el Burguer Show 2025
Llevar la propuesta de Murrah al Burger Show en Guayaquil no fue fácil. “Tuvimos que improvisar, viajar con antelación, resolver en el camino. Cuando escuchamos nuestro nombre como ganadores, todo cobró sentido”, recuerda Lilibeth emocionada.
El resultado: filas interminables, clientes que esperaban hasta 30 minutos y repetían. “Ahí entendimos que había valido la pena. Tres días intensos, pero maravillosos”.
Murrah hoy: más allá del premio
Murrah atiende en Cumbayá de miércoles a domingo, con una carta que gira en torno al búfalo. Las estrellas del menú son la hamburguesa “Victoria” (la ganadora del Burger Show) y la hamburguesa “Buffalo”, que lleva una intensa salsa satay y guanciale artesanal de cerdo negro criollo.
“No solo vendemos hamburguesas, compartimos una filosofía de respeto, sabor y autenticidad”, concluye Lilibet. Y eso se nota desde el primer bocado.