Un equipo de científicos norteamericanos encuestó a 7.600 personas de Estados Unidos (4.200 mujeres y 3.400 hombres), con edades entre los 18 y los 65 años, para conocer cuáles eran los hábitos de higiene y también sus peligros.
El artículo, publicado en la revista especializada JAMA Dermatology, reveló que por ejemplo una de cada cuatro personas se habían lastimado mientras recortaban el vello púbico y que el número de heridas aumentaban a medida que se rasuraban con mayor frecuencia.
Las lesiones en el área púbica podrían hacer a las personas más vulnerables a las infecciones, incluyendo las enfermedades de transmisión sexual», dijo el doctor Benjamin Breyer, vicepresidente de urología en la Universidad de California en San Francisco y co-autor del trabajo.
De los 7.600 encuestados, casi el 5.700 voluntarios -alrededor del 76%- aseguró que en algún momento de sus vidas habían «retocado» su vello púbico (85% mujeres y 67% hombres).
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El 94% de estos dijeron que lo hacían solos y sin ayuda de nadie, y que las herramientas más utilizadas son las hojitas de afeitar, luego las tijeras, la cera y en último lugar, la depilación láser. Además, el 26% (1.400 personas) dijo haberse cortado antes de empezar a depilarse.
Por otro lado, las lesiones más comunes fueron: cortes durante la afeitada (61%), quemaduras (23%) y erupciones cutáneas (12%).
El 9% afirmó haber contraído algún tipo de infección tras cortarse con una «cuchilla», de ellos 49 individuos necesitaron antibióticos y 36, puntos o un drenaje percutáneo.
Con respecto a los zonas más lastimadas, los hombres lastimaron sobre todo el escroto (67%), seguido por el pene (35%) y el pubis (29%); mientras las mujeres, el monte de venus (51%), luego la ingle (45%), la vagina (43%), el área entre la vagina y el ano (13%) y el ano (6%).
Fuente: Infobae