La ciencia está cerca de lograr que los humanos puedan leer otras mentes. Los científicos de la Universidad de Carnegie Mellon, en la ciudad de Pittsburgh, Estados Unidos; llevaron adelante una investigación donde identificaron algunos de los complejos patrones cerebrales responsables de la formación de oraciones en la mente para ver si era posible descifrarlos previamente.
PUBLICIDAD
Los resultados los sorprendieron: los expertos consiguieron predecir pensamientos de otras personas con un 87% de precisión.
¿Cómo lo hicieron?
Con inteligencia artificial (IA). Los especialistas diseñaron una tecnología de escaneo cerebral que puede identificar pensamientos complejos.
Esta tecnología de «lectura de la mente» demostró que este tipo de pensamientos están formados por diversos subsistemas del cerebro y, al parecer, no están basados en palabras.
El estudio ofrece nuevas pruebas de que las dimensiones cerebrales de la representación conceptual son universales entre las diferentes personas e idiomas y por lo tanto, más fácilmente descifrables.
El estudio, dirigido por el profesor de psicología en Carnegie Mellon, Marcel Just, reveló que para procesar frases como «el testigo gritó durante el juicio» (analizada en la investigación), el cerebro usa un alfabeto de 42 «componentes de significado» o «rasgos semánticos» sobre las personas, los tamaños, las interacciones sociales y la acción física que están involucrados en cada oración.
PUBLICIDAD
Cada información se procesa en un sistema cerebral diferente, que es la forma en que el cerebro también procesa la información de los objetos.
Al medir los niveles de activación en cada sistema cerebral, el programa puede decir exactamente qué tipos de pensamientos están siendo contemplados.
Uno de los grandes avances del cerebro humano fue la capacidad de combinar conceptos individuales en pensamientos complejos. Pensar no sólo en ‘bananas’, sino en ‘me gusta comer bananas a la noche con mis amigos'», dijo el doctor Just.
«Por fin hemos desarrollado una manera de ver pensamientos de esa complejidad en la señal del la resonancia magnética funcional (o fMRI). El descubrimiento de esta correspondencia entre los pensamientos y los patrones de activación del cerebro nos dice de qué se construyen los pensamientos».
Es decir, los científicos lograron que la inteligencia cerebral que desarrollaron pueda recolectar información de la resonancia y, de esa manera, con un algoritmo adecuado, detectar patrones de activación del cerebro.
Trabajos anteriores del doctor Just y su equipo ya habían demostrado que los pensamientos sobre objetos familiares -como bananas o martillos- evocan patrones de activación que involucran los sistemas cerebrales que usamos para tratar con esos objetos.
Por ejemplo, la forma de interactuar con una banana implica pensar en cómo se la sostiene, cómo se come y cómo se ve.
Además de acertar con precisión los significados, el sistema también fue capaz de trabajar a la inversa: recibir una oración y crear una imagen correcta de cómo se hubiera activado el cerebro humano para formarla.
Este avance hace posible por primera vez decodificar pensamientos que contienen varios conceptos. Es decir, lo que compone la mayoría de los pensamientos humanos están compuestos», indicó Just.
«Un paso siguiente podría ser decodificar el tema que una persona está pensando, como ‘geología’ o ‘skateboarding’. Estamos en camino de hacer un mapa de todos los tipos de conocimientos en el cerebro»
Aunque aún no es posible que la IA desentrañe en qué está pensando una persona en tiempo real -al menos todavía-, con esta tecnología sí se podría descifrar el tipo de pensamiento que está teniendo el usuario luego de un simple escaneo cerebral.
«Este avance hace posible por primera vez descodificar pensamientos que contienen varios conceptos», indicó Just. Es uno de los avances más precisos en cuanto a la decodificación cerebral hasta el momento y puede sentar bases para descubrimientos futuros.
Fuente: Infobae