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Un terrier alemán de dos años se perdió la semana pasada en Saboya (región de Europa) durante un viaje con sus dueños. Pero, el can llamado Pablo, logró recorrer 380 kilómetros para regresar a su casa.
Catherine y Roger se fueron de viaje a Italia con su autocaravana. Durante una escala en Saint-Martin-de-Belleville, el perro salió solo a pasear. Sin embargo, comenzó a pasar el tiempo y Pablo no regresaba, algo que preocupaba a la pareja porque su mascota acostumbraba a pasear sin compañía.
«Esperamos durante horas. Incluso pasamos la noche allí, sin éxito», dice Catherine, según recoge el medio France Bleu.
Al día siguiente, la pareja llamó a la Policía para colocar la denuncia de la desaparición del perrito.
Tras unos días de espera y angustia por Pablo, un amigo de la pareja, responsable de vigilar su casa, les envió una foto por mensaje de texto para indicarles que había reconocido al can.
“Arriba, reconocí a Pablo, no lo podía creer, fue un verdadero momento de felicidad”, agregó al medio Catherine.
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De esa forma, el peludo de cuatro patas logró llegar a su hogar tras recorrer 380 kilómetros.
Ahora, sus dueños le compraron un collar con GPS.
¿CÓMO LO LOGRÓ?
De acuerdo con el veterinario Xavier Villacís, los perros regresan a sus hogares de acuerdo a su ubicación espacial, por referencias geográficas.
<strong>«Alguna calle, montaña o casa. Probablemente se ubicó de esa forma. Seguidamente, de una manera instintiva debido al olor. Los perros tienen una gran capacidad olfativa y por ello los perritos logran regresar a casa» </strong>
