Anya Taylor-Joy se convirtió, este pasado domingo, en la primera mujer con descendencia latina en alcanzar un Globo de Oro a mejor actriz en una serie. Su papel en “Gambito de Dama” no solo la puso bajo la lupa de los mejores directores sino que le ha dado varios reconocimientos.
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A sus 24 años ha trabajo en importantes proyectos y con lo conseguido en la ceremonia de los Globos de Oro la colocaron en portadas de varios medios. Sin embargo, la revista Variety hizo una polémica referencia: “actriz de color”.
«La argentina Taylor Joy es la primera mujer de color en ganar esta categoría desde Queen Latifah en 2008 y solo la quinta mujer de color en obtener la victoria desde 1982», se leía en el artículo.
El impacto de las críticas en redes sociales llevaron al prestigioso medio a modificar su nota. Aclaró que Anya Taylor-Joy «se identifica a sí misma como una latina blanca».
¿Qué llevó a catalogarla como “mujer de color”?
Debido a sus múltiples raíces (argentina-británica-estadounidense) pudo haber confundido a varios norteamericanos. Los estadounidenses no consideran que alguien de origen latino pueda ser catalogado como blanco.
El término de persona de color fue utilizado en los siglos XVIII y XIX para referirse a sujetos de raza negra o mixta.
«La categoría en sí es una forma de identificar a una comunidad de individuos. Tal vez se ve como algo artificial, pero lo que hace a ‘una persona de color’ en EE.UU. es que pertenece a una minoría racial o étnica», explica Efrén Pérez, profesor de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA).
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En otras palabras, la categoría “persona de color” en Estados Unidos no está relacionada con las características físicas de una persona – como en el caso de Anya Taylor- sino también con su origen étnico.
En cuanto al origen étnico, es común que en EE.UU. a cualquiera que provenga de América Latina o España se lo clasifique como «persona de color» por el hecho de hablar español, independientemente de que sus ancestros sean de origen europeo.
Eso es lo probablemente sucedió en el caso de Anya Taylor-Joy, a la que en Variety consideraron «de color» por sus raíces argentinas, sentenció Pérez para la BBC.
