Siete candidatos presidenciales coincidieron este sábado en la necesidad de fortalecer a la Policía para combatir la inseguridad en Ecuador, y expusieron sus propuestas de campaña en temas como la economía, la salud y la lucha contra la corrupción.
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Los planteamientos los realizaron en una cita denominada «Debate presidencial 2021» en la que, sin intercambio de criterios entre los postulantes, hablaron por turnos sobre sus propuestas, con el tiempo controlado por cronómetro.
Ecuador se prepara para designar al sucesor de Lenín Moreno en los comicios del 7 de febrero con un récord de 16 candidatos calificados en firme.
Este sábado participaron en la primera jornada del encuentro Guillermo Lasso (Creo), Ximena Peña (Alianza País), Paúl Carrasco (Juntos Podemos), Geovanny Andrade (Unión Ecuatoriana), Carlos Sagnay (FE), Gustavo Larrea (Democracia Sí) e Isidro Romero (Avanza).
El diario El Comercio, organizador del encuentro, informó de que el candidato Andrés Arauz, afín al exjefe de Estado Rafael Correa (2007-2017), «debía intervenir este 9 de enero del 2021, pero declinó participar en el encuentro, pese a que su equipo estuvo presente en el sorteo».
Se prevé que el segundo grupo de candidatos hable sobre sus propuestas de Gobierno en el mismo escenario este domingo domingo.
SEGURIDAD
Los candidatos que se presentaron este sábado en las instalaciones de la Casa de la Cultura Ecuatoriana coincidieron en que se debe dotar de mejor equipamiento a los Policías para combatir la inseguridad, una de las mayores preocupaciones de los ciudadanos.
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Lasso, a quien los analistas políticos ven junto a Arauz en una segunda vuelta el 11 de abril, habló de la necesidad de reforzar también al Ejército para mejorar el control en las fronteras y, sin mayores explicaciones, indicó que se debe dar más seguridad a los agricultores y ganaderos.
Añadió que se debe reforzar las instituciones relacionadas con la justicia para garantizar la aplicación de las leyes.
De su lado, Romero dijo que si no se aplica «la pena de muerte a los asesinos, a los criminales que matan en las calles a los ecuatorianos y violan a las mujeres ecuatorianas, nada va a pasar en el Ecuador poniendo más policías«.
Además habló de «cadena perpetua» para los corruptos, así como de incautación de sus bienes.
También Sagñay apuesta por «introducir la cadena perpetua, no solamente para los delincuentes comunes y corrientes sino, sobretodo, para los delincuentes de cuello blanco, que no solamente son ladrones sino traidores a la patria».
ECONOMÍA Y SALUD
Los candidatos se refirieron a la difícil situación económica que afronta el país, agravada por la pandemia, por lo que coincidieron en la necesidad urgente de trabajar para crear empleo.
Lasso reiteró su oferta de inversión en infraestructura vial, así como en la de capitalizar el Banco Nacional de Fomento con 1.000 millones de dólares para dar crédito al sector agropecuario al 1 % de interés y a 30 años plazo, además de apoyar a los emprendedores.
Sin explicar el mecanismo, Peña habló de un ingreso excepcional a quienes perdieron empleo, algo que «no es un gasto, es una inversión con rentabilidad social para activar el consumo, producción, empleo y recaudación tributaria».
Carrasco ofreció una amnistía bancaria para los ciudadanos endeudados, reestructuración de deudas bancarias para diez años, a un interés del 1 %, para que puedan reactivar la economía familiar.
Romero sostuvo que se debe abrir el país a la inversión externa, reforzar el agro, «ver con buenos ojos la minería» y reducir el Impuesto al Valor Agregado (IVA).
Sagñay apuesta por bajar las tasas de interés, permitiendo la competencia internacional de bancos, mientras Larrea quiere potenciar el agro y «dar el salto a ser una potencia agroindustrial«, algo con lo que también concuerda Romero.
En temas sanitarios, los siete candidatos presidenciales coincidieron en que es urgente reforzar el sistema de salud, severamente afectado por la covid-19.
