mundo

Acusan a hombre de querer secuestrar a un niño solo por ser afroamericano

Peter, un afroamericano nacido en Uganda, en su vida ha tenido barreras sumamente fuertes. Desde su infancia tuvo que soportar la dura situación económica que atravesaba la numerosa familia con la que compartía el suelo de su morada para lograr dormir.

Fue a los 10 años cuando Peter decidió alejarse de todo ello y enfrentar la vida completamente solo. Durante dos años, él vivió en la calle. En este duro ambiente aprendió una habilidad invaluable para la vida: reconocer la bondad en otras personas con solo una mirada.

Fue un hombre, Jacques Masiko, quien propinó de educación y un hogar a Peter. El sujeto lo llevó a una escuela pública y después recogió de la calle para que su vida tome un rumbo distinto.

Recomendados

Décadas después, Peter trabaja para una ONG y está felizmente asentado en Estados Unidos. Fue en uno de sus viajes que entendió que varios niños en norteamérica, necesitaban un hogar y se motivo a adoptar a un infante, tal y como le pasó a él.

Peter adoptó a Anthony (niño de 10 años). Los dos se distinguen por su color de piel, lo cuál ha provocado en más de una ocasión problemas con las autoridades.

En este año, Peter acogió a su cuidado a otro infante de siete años, llamado Johnny. El cabello lacio y su figura pálida atrae más miradas sospechosas de transeúntes y uniformados.

Después del asesinato de George Floyd en Estados Unidos en mayo, mantuvieron una larga y emotiva conversación sobre el movimiento Black Lives Matter. Peter le pidió a Anthony, su primer hijo, que se asegurara de tener su teléfono móvil listo si la policía los paraba por la calle.

«Como hombre negro, tengo 10 segundos para explicar quién soy a la policía antes de que potencialmente escale la situación», dice Peter.

«Siempre le digo a Anthony, ‘si la policía me para, por favor agarra el teléfono y graba de inmediato’. Porque sé que él es mi único testigo, ¿sabes? Y tengo 10 segundos para salvar mi vida».

Acusan de secuestrador

Johnny, de siete años, estaba a punto de tener un ataque de nervios. Se había despertado de mal humor y la cosa solo iba a peor a medida que avanzaba el día.

En un restaurante en Charlotte, Estados Unidos, Peter vio que Johnny discutía con otro niño en el área de juegos. Tenía que actuar rápido para sacar del restaurante al niño, al que tiene acogido temporalmente, antes de que estallara en una fuerte rabieta.

Peter lo tomó en sus brazos y rápidamente pagó la cuenta.

Mientras llevaba a Johnny al coche, el niño se retorcía malhumorado y todavía estaba agitado cuando Peter lo puso en el suelo para poder abrir la puerta del coche.

Una mujer se les acercó con el ceño fruncido. «¿Dónde está la madre de este niño?», preguntó.

«Yo soy su padre», respondió Peter.

La mujer dio un paso atrás y se paró frente al coche de Peter. Miró la matrícula y sacó su teléfono. «Hola, policía, por favor», dijo tranquilamente. «Oiga, hay un hombre negro. Creo que está secuestrando a un niño blanco».

De repente, Johnny se quedó quieto y miró a Peter. Peter lo rodeó con el brazo. «No pasa nada», le dijo al niño, contó a la BBC

El objetivo de Peter es cimentar un buena relación con Anthony y Johnny. Para el niño de siete a los es una etapa transitoria ya que pronto tendrá un nuevo hogar. Mientras que Peter planea un viaje a Uganda para mostrarle sus raíces.

Te puede interesar

Tags

Lo Último


Te recomendamos