Un adolescente estadounidense de 15 años sufrió quemaduras de segundo grado por la explosión del cargador de su teléfono celular. Colton Pingre puso su dispositivo a cargar antes de acostarse y lo metió bajo su almohada.
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Al pasar la medianoche, el joven despertó en el piso y con su cama en llamas. Colton, sacudido por el pánico, lanzó el cargador al inodoro y usando una botella de agua procedió a limpiar sus heridas.
«Miré hacia arriba y vi que tanto mis mantas como una de las almohadas estaban en llamas», contó el adolescente a LADBible.
Producto de la explosión, la espalda y brazos del adolescente resultaron con quemaduras. La explosión fue tan grande que fragmentos del cargador se esparcieron por toda la habitación.
«Después de apagar las llamas, agarré una botella de agua que tenía junto a mi cama y tenía una pequeña navaja a mi lado, así que hice un agujero en la parte superior de la tapa y comencé a rociar las manchas que aún estaban humeantes y rojas”, relató el joven.
Afortunadamente, las lesiones ahora se están curando, pero la familia está ansiosa por asegurarse de que otras personas tengan cuidado cuando se trata de cargar aparatos eléctricos al lado de la cama.
¿Es peligroso dormir con el celular bajo la almohada?
Los celulares necesitan ser ventilados. No deben estar expuestos a niveles extremos de calor o frío, pues eso podría causar fallas en tu teléfono.
Ahora, qué podría pasar cuando lo dejamos bajo la almohada. El equipo se podría calentar en exceso. Si la batería se expone tanto tiempo al calor puede inflarse al grado de explotar.