La pandemia del coronavirus ha provocado estrés e incertidumbre en medio de las estrictas medidas que las autoridades de la salud han instruido para frenar la propagación.
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El constante pensamiento de la higiene, el aislamiento y el distanciamiento social, en muchos casos indefinido, ha causado que millones de personas en el mundo entren en procesos emocionales complejos y manifiesten estrés, tristeza y ansiedad.
El miedo es la principal sensación que las personas están enfrentado a más de tres meses de la detección del nuevo virus que ya está presente en la mayoría de los países con más de 465.000 casos confirmados.
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La coordinadora de la Sección de Psicología Clínica del Colegio Oficial de la Psicología de Madrid, Mercedes Bermejo, en una entrevista para el portal Cuídate Plus, asegura que el miedo es saludable, siempre y cuando las personas lo aprendan a manejar.
“El miedo es una emoción desagradable, pero muy saludable, necesaria y adaptativa. Sin embargo, el miedo intenso y extremo lleva a un bloqueo emocional que lo que hace, en muchas ocasiones, es paralizarnos. La consecuencia es que nos anula la capacidad de reaccionar o de buscar soluciones o alternativas que nos ayuden a estar mejor”, explica.
¿Cómo manejar el miedo y la incertidumbre en plena contingencia por coronavirus?
Las técnicas de relajación pueden ser de mucha utilidad en el actual contexto, afirma Bermejo.
“Practicar diferentes técnicas de relajación, como la respiración profunda, la meditación, el mindfulness y la autoconciencia. Esta última herramienta se centra en tomar conciencia de uno mismo, pensar más en el presente y buscar soluciones para el aquí y el ahora”, detalla.
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Estas son algunas de las prácticas de relajación recomendadas por la medicina
El servicio informativo de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, Medineplus, recomienda diversas actividades para controlar el estrés y evitar problemas de salud como presión arterial alta, dolores de estómago, dolores de cabeza, ansiedad y depresión.
Respiraciones profundas: esta práctica puede realizarse en cualquier lugar, solo debe variar las formas de inhalación y exhalación tratando de retener el oxígeno por unos segundos.
Meditación: puede ayudar a reaccionar de manera más calmada a las emociones y pensamientos
Yoga: combina posturas o movimientos con respiración enfocada y meditación.
Taichí: es ejercicio suave de bajo impacto con el que se puede descargar la tensión.
Relajación progresiva: consiste en apretar los músculos por unos cuantos momentos y luego liberarlos. Este ejercicio se divide por zonas del cuerpo. Puede empezar por los pies y subir progresivamente hasta la parte superior.