En esta nueva administración de la Epmaps, Quito implementará medidores de agua inteligentes con la finalidad de evitar el desperdicio de agua en la capital. Además, a futuro, también se contempla la instalación de controladores para grifos de cocina y baños.
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Carlos Uriarte, Gerente General de la entidad, indicó que se va a adquirir 444 medidores inteligentes que estarán a disposición de la ciudadanía, los cuales ayudarán a evitar el desperdicio del líquido vital.
El funcionario indicó que la instalación de estos dispositivos empezará por el sur de la ciudad, luego serán prioridad las zonas comerciales y se continuará con las residenciales.
«Vamos a empezar a socializar el proyecto y en unos 15 días estaremos lanzando el concurso público para la adquisición de los medidores de agua, lo cual se llevará a cabo con financiamiento propio de la Epmaps», dijo.
A esto se sumarán aditamentos para baños y grifos, que suelen presentar goteo de agua. Esto irá acompañado de una ordenanza metropolitana para que todo constructor a futuro lo coloque obligatoriamente en sus edificaciones, de igual forma los ciudadanos en sus construcciones, y también para la ciudadanía en general, con el fin de para colaborar todos en el ahorro de agua.
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¿Qué harán estos equipos?
El medidor que se pretende incorporar tiene un chip que determina la cantidad de metros cúbicos que consume el ciudadano. En el momento en que este aparato detecte desperdicio, por ejemplo, cuando alguien olvida un grifo abierto y se presenta un consumo continuo, el sistema bloqueará el paso del líquido vital de forma inmediata.
También, el mecanismo servirá para enviar información del consumo a un sistema computarizado, que nos dará el valor a pagar, y enviará la planilla a su correo electrónico. La factura física todavía se mantendrá hasta que la gente se acostumbre a este nuevo método, indicó la autoridad.
“Queremos que todo el proceso de lectura de consumo y cortes de servicio sea electrónico”.
En cuanto a los controladores en grifos, estos dispositivos regulan la presión de agua y el goteo. Por ejemplo, si los lavabos no están bien, el mecanismo lo controla y bloquea.
Para Uriarte, esta tecnología evitará que haya desperdicio, lo cual se verificará en reducción de costos en la planilla. «Esto no es un gasto, sino más bien una inversión y una forma de colaborar y evitar el desperdicio».
