La nación musulmana del sudeste asiático, Brunei, es gobernada con puño de hierro por Hassanal Bolkiah. Este sultán es el máximo representante del islam en el país.
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El nuevo código penal incluye a la homosexualidad como un delito que será juzgado por lapidación; apedreando a los hombres hasta la muerte. En lo que corresponde a otros tipos de condenas se destacan la mutilación de la mano o el pie por robo; la pena capital por blasfemia.
¿Realmente la homosexualidad puede ser “curada”?
Este anuncio realizado el pasado sábado, según el sultán, «apuntaría a ayudar a mantener la paz y el orden y su principal objetivo es el de educar, respetar y proteger los derechos legítimos de todos los individuos de cualquier raza y fe».
Matthew Woolfe, fundador de la organización The Brunei Project, señaló que los cambios en el ordenamiento penal crean miedo y ansiedad entre los habitantes.
