Danielle Gillies salió de fiesta con sus amigas como cualquier fin de semana y nunca se imaginó la desagradable e inexplicable “sorpresa” que se encontró al volver a su departamento.
PUBLICIDAD
La joven de 23 años sintió olor a humo y descubrió dos “objetos personales” quemados y daños en su armario debido al fuego.
Danielle no entendía lo que pasaba, sin embargo terminó sabiendo la verdad. Su novio Luke Hicks había quemado dos vibradores de la joven en “venganza” porque ésta no estaba en la casa cuando había regresado.
El sujeto de 24 años había estado todo el día jugando a las carreras de caballos y había bebido al menos 15 cervezas, además de vodka y champagne, indica Mirror.
Cuando llegó al departamento y encontró que su novia no estaba, Hicks desató todo su enojo, sacó los vibradores de la cómoda (avaluados en $53 mil cada uno) y les prendió fuego.
La joven terminó de inmediato con el sujeto, sin embargo este le empezó a enviar cientos de mensaje rogándole que volvieran. Muchos de estos textos comenzaron a ser violentos, por lo que Danielle lo denunció y el caso llegó a la justicia.
En el juicio, Hicks admitió daños y acoso criminal y su abogado trató de justificar sus actos asegurando los cometió estando “extremadamente borracho”.
Finalmente, el hombre fue sentenciado a pagar $13 mil y $42 mil por cada uno de los vibradores, $100 mil por el armario y $185 mil por otros daños. Además, se dictó una orden de restricción y no podrá ponerse en contacto por dos años con Danielle.