Los padres de Nathaly Salazar, la joven ecuatoriana con nacionalidad española y desaparecida en Perú el pasado 2 de enero, denunciaron hoy haber sido víctimas «de extorsión» y ofrecieron una recompensa para quien otorgue «una pista o información fiable» sobre el paradero del cuerpo de su hija.
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La familia de Nathaly envió este 8 de febrero un comunicado a los medios de comunicación, en el que reproducen parte de la declaración de los detenidos como sospechosos del homicidio de la joven ecuatoriana, desaparecida en Cuzco mientas practicaba tirolina y cuyo cuerpo no ha sido encontrado todavía.
Sus familiares, residentes en la ciudad española de Valencia (este), afirman que solo darán la recompensa cuando comprueben la pista o la información que se les proporcione, porque varias personas se han puesto en contacto con ellos para decirles que saben dónde está Nathaly, e incluso les han llegado a decir que está enterrada.
«Hemos sido víctimas de extorsión», denuncian en el comunicado, en el que también piden a la compañía de telecomunicaciones Claro que les proporcione la última localización del teléfono móvil de la joven desaparecida.
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Solicitan también que se realice a los implicados en la muerte de Nathaly la prueba del polígrafo, con el fin de esclarecer los hechos, y piden a las autoridades peruanas que se involucren y presten los medios necesarios en la búsqueda del cuerpo.
Salazar, de 28 años, salió de su hospedaje el pasado 2 de enero con intención de visitar los centros arqueológicos en Maras y Moray, a unos 40 kilómetros de la ciudad del Cuzco, un destino que se hace en un sólo día, pero nunca regresó.
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Por su desaparición fueron detenidos el dueño y un trabajador de un servicio de transporte rústico elevado similar a un teleférico, que ofrecía a los turistas una visión panorámica del Valle Sagrado de los Incas.
Ambos aseguraron que la joven sufrió un accidente que le causó la muerte, al golpearse mientras usaba el aparato, que consiste en una canastilla sostenida con cables elevados, y que por temor ambos tomaron la determinación de ocultar su cadáver y luego arrojarlo a las aguas del río Vilcanota-Urubamba, en un sector conocido como Paucarbamba.
Los detenidos están en prisión preventiva acusados de los presuntos delitos de homicidio culposo, encubrimiento real, omisión de denuncia y hurto agravado.
Desde que se tuvo conocimiento de lo que le sucedió a su hija, los padres de Nathaly permanecen en Perú, donde seguirán hasta que aparezca el cuerpo.
En el comunicado, anuncian que el próximo domingo tendrá lugar una nueva batida con voluntarios para intentar localizar el cadáver de la joven.
Fuente: EFE
