En Estados Unidos, una veterinaria disparó contra el perro de su vecino debido a que este ‘ladraba mucho’.
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De acuerdo con Infobae, los hechos ocurrieron en River Ridge, un pequeño pueblo de Nueva Orleans.
Incluso la Policía quedó conmocionada por el caso. Frases como ‘esto no es normal’ fueron declaradas por el sheriff Joe Lopinto a la prensa al dar a conocer el extraño caso.
«Es una locura, un veterinario disparando al perro de su vecino de al lado. Locura. No sé qué nombre ponerle. Esto no es lo que los veterinarios hacen… Todos podemos quejarnos sobre los ladridos del perro de un vecino, pero esto supera todo», agregó en la conferencia de prensa Lopinto.
La veterinaria disparó en la cabeza a Brusier, un bulldog de 15 meses que pertenecía a Stacey Fitzner.
Fitzner señaló a la prensa que su perro era amigable y querido por todo, salvo por su ‘irascible’ vecina veterinaria, la menos pensado. «Siempre estaba en la cama con nosotros», contó la mujer describiendo hasta dónde llegaba el amor por su perro. Pero Kelly Folse no lo quería. Al contrario, lo odiaba.
Harta de los ladridos, Folse -veterinaria de 35 años- grabó al perro en acción, envió los videos a la policía y llenó papeles denunciando lo molesto de la situación y se los enviaba a la dueña. Fueron seis meses de colectar pruebas, hasta que dijo basta.
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El pasado miércoles cuando Fitzner fue a su trabajo su madre pasó por el frente de su vivienda y vio a Brusier tendido sin reaccionar. Al acercarse pudo ver el dramático cuadro. El revoltoso perro estaba en un charco de sangre. Tenía una herida de bala en la cabeza pero aún estaba con algo de vida.
Fue trasladado de urgencia al Hospital Veterinario Abadie, donde Folse trabajaba. Y aunque su vecina no estaba, los otros médicos intentaron reanimarlo, sin suerte. La bala había ingresado a su cráneo por el ojo derecho. Los médicos aconsejaron sacrificarlo para que el sufrimiento no continuara. Y así lo hicieron.
Fitzner dio aviso a la policía y señaló a Folse como posible responsable. Les mostró mensajes de texto inapropiados que su vecina le había enviado respecto al perro. Los oficiales allanaron la vivienda de la veterinaria y la detuvieron por crueldad animal agravada, posesión y disparo de arma de fuego y posesión de drogas.
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