Una persona murió y otras cuatro resultaron heridas cuando la aeronave de propiedad de la organización Greenpeace en que sobrevolaban la Amazonía brasileña cayó hoy a un río amazónico por razones aún desconocidas, informaron voceros del grupo ecologista.
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«Podemos confirmar que una de las cinco personas que estaban a bordo de la aeronave murió y que las otras cuatro sufrieron heridas, aunque no de gravedad, y ya fueron rescatados», dijo a Efe un vocero de Greenpeace Brasil.
La aeronave, un Cessna Caravan 208 y matrícula PR MPE, de tipo anfibio, es decir equipado para aterrizar en el agua, cayó al Río Negro en una región próxima al archipiélago de las Anavilhanas, un conjunto de islas en ese afluente del Amazonas, en jurisdicción de Nova Airao, ciudad en el estado brasileño de Amazonas (norte de Brasil).
El accidente ocurrió hacia las 15.00 hora local de Brasilia (17.00 GMT) por razones aún desconocidas en el momento en que el hidroavión intentaba aterrizar en el río.
La única víctima, al parecer una militante de un país europeo que se dirigía a un hotel en las Anavilhanas, no consiguió abandonar la aeronave antes de que las aguas inundaran gran parte de la cabina.
Los cuatro sobrevivientes fueron rescatados por lanchas de la embarcación Comandante Natal, que estaba a cerca de un kilómetro del lugar del accidente.
Los tripulantes del Comandante Natal consiguieron enderezar la aeronave, que dio un vuelco tras chocar contra el agua, para impedir que se hundiera.
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Greenpeace informó en un comunicado que está «concentrando todos sus esfuerzos en ofrecer asistencia a las víctimas y a sus familias, así como en colaborar con los órganos competentes que están investigando el hecho».
La Fuerza Aérea Brasileña (FAB) informó de que envió al lugar del accidente un equipo del Servicio Regional de Investigación y Prevención de Accidentes Aeronáuticos (Seripa) para intentar identificar las causas del siniestro.
EFE
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