La canciller ecuatoriana, María Fernanda Espinosa, dijo en una entrevista con Efe que su país «ve con gran preocupación» las nuevas políticas migratorias de EE.UU. y espera que se respeten los derechos de los emigrantes.
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«Hemos tomado medidas, un plan de contingencia que hemos puesto a disposición de los migrantes para apoyo legal» y ayuda para los deportados, afirmó Espinosa, tras explicar que la Constitución de su país reconoce el principio de ciudadanía universal.
Recordó además que el Congreso de Ecuador aprobó en enero pasado la ley de movilidad humana que garantiza derechos a los ecuatorianos en cualquier parte del mundo, pero también derechos a todas las comunidades que se han establecido en Ecuador.
Aseguró que su país «puede hablar con autoridad» en materia de derechos migratorios porque tiene el mayor número de refugiados de América Latina y el Caribe, a los que trata con dignidad.
Indicó que han recibido a 90.000 colombianos refugiados y tienen alrededor de 200.000 solicitudes de refugio y comunidades que viven en el Ecuador con los mismos derechos que los ecuatorianos, entre ellos estadounidenses, canadienses y europeos.
Además, Ecuador se ha convertido en un destino para jubilados de EE.UU.
«Por eso es que tenemos una voz de autoridad para exigir que de la misma manera que tratamos a las personas de distintos orígenes en Ecuador, de esa misma manera se trate a nuestros compatriotas que viven en otras naciones y en este país», afirmó la canciller, que visita Nueva York por la Asamblea General de la ONU junto al presidente Lenín Moreno.
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Espinosa, que ocupa el cargo desde el pasado mayo, señaló que han propuesto un diálogo a la Administración de Donald Trump para poder analizar el tema migratorio, pero no ha habido respuesta.
«Estamos proponiendo a EE.UU. tener una mesa de discusión en materia migratoria. Queremos lograr soluciones y que si nuestros compatriotas están aportando a este país, pagando impuestos, que tengan derechos», afirmó, para agregar que esperan que sea aceptada por este país su iniciativa.
Afirmó que Ecuador no apoya «ninguna política discriminatoria, ni xenófoba, ninguna política de represión y persecución a personas que no hayan cometido ningún delito».
Espinosa, que ha sido embajadora de Ecuador ante la ONU en Nueva York y en Ginebra, así como ministra de Defensa Nacional, reiteró el apoyo a las conversaciones entre el Gobierno y la oposición venezolana en la República Dominicana.
Pero también criticó a la Organización de Estados Americanos (OEA) y cree que no es la institución indicada para intervenir en la crisis venezolana.
«Hay una polarización y una fuerte toma de posición de su secretario general (Luis Almagro) sin mandato de los Estados», sostuvo.
«Pero, sí vemos con muy buenos ojos la iniciativa de la República Dominicana, el liderazgo del presidente (Danilo) Medina, los países que han sido convocados para avanzar en el diálogo y el papel del expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero», indicó.
Aseguró que ven «con mucho entusiasmo y esperanza» ese proceso de diálogo, al que hay que «hay que darle la fuerza necesaria para que avance».
«Creo que eso beneficia a Venezuela, a la integración regional y sobre todo, a su pueblo», insistió.
La próxima cita para el diálogo está fijada para el próximo 27 de septiembre, pero no ha cesado la controversia entre las partes, lo que amenaza con descarrilar los esfuerzos que lleven a una solución de la crisis.
«Cuando hay dificultades internas en un país las cosas no se resuelven por la magia ni automáticamente», afirmó la canciller ecuatoriana.
Fuente: EFE
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