Steven Hanes no lo podía creer. Despertó tras una operación en donde le iban a extirpar su testículo derecho, pero al abrir los ojos y ver a los médicos con cara afligida, supo que algo malo iba a pasar.
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Todo comenzó cuando empezó a sufrir dolores en dicha zona. Al visitar un urólogo, este le indicó que ese punto lo tenía atrofiado, por lo cual debían practicarle una orquiectomía.
Y dicha operación fue todo un éxito, acorde a lo informado por el Washington Post. Sin embargo, esto pasó a un segundo plano debido a que si bien el procedimiento quirúrgico se hizo de buena forma, un inexcusable error quedó al descubierto.
«Parece que el testículo izquierdo fue extirpado en vez de hacerlo con el correcto», escribió el cirujano Spencer Long en su informe tras la operación.
Ante esto, Hanes presentó una demanda al especialista y al Hospital J.C. Blair Memorial de Pensilvania por negligencia médica. Por este motivo, tras cuatro años de juicio, el hombre recibió una indemnización de US$870 mil, sumándole otros US$250 mil por daños punitivos.
Pese a esto, el abogado de la víctima relató que su cliente lo ha pasado bastante mal, considerando que el caso fue portada de diarios y portales web en todo el mundo debido a lo singular del hecho.
«Entiendo que este caso se volviera viral por la parte del cuerpo que está involucrada, pero lo cierto es que esta condición ha afectado a mi cliente de manera significativa», expresó.
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De igual manera, precisó que «aunque algunos pueden verlo como algo cómico, la indemnización fue totalmente justificada de acuerdo con las evidencias presentadas y el costo que ha tenido que pagar Steve».
El jurista catalogó de «explicación sin ningún sentido anatómico» la excusa que brindó el cirujano por su error. «Afirmó que había quitado el testículo que estaba en el lado derecho del escroto y que el testículo tenía un cordón espermático que conducía al lado izquierdo del cuerpo», manifestó, agregando que «en definitiva, que el médico afirmó en algún momento que los testículos habían cambiado de lado en algún momento».
Sobre esta situación, el Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos aseguró que «pocos errores médicos son tan aterradores como aquellos que involucran a pacientes que han sido sometidos a una cirugía en la parte del cuerpo equivocada, con un procedimiento incorrecto o que, incluso, realizaron una cirugía destinada a otro paciente».
