Cuenca

Madres brindan amor a los animales de zoológicos de Quito y Cuenca

Los animalitos también necesitan del amor maternal y estas “madres” demuestran que el amor existe en toda dimensión. Ellas laboran en los zoológicos de Quito y Cuenca y compartieron con METRO su historia.

(Max Araujo Fotografia)

El amor maternal es generoso y universal y así lo demuestran Heidi Cabezas y Ellie Harris, quienes con gran cariño se han convertido en madres sustitutas de los Zoológicos de Quito y Cuenca, respectivamente.

PUBLICIDAD

Aunque nunca se imaginaron convertirse en “madres” de los animalitos que llegan al zoológico, ahora proveen de cuidados y cariño sin distinción de la especie, casi con un horario de 24/7.

En el caso de Heidi, quien labora hace 9 años en el Zoológico de Guayllabamba y desde hace algunos años está a cargo de la alimentación de los animales de las distintas salas del zoológico, como boas, ranas y aves, además de cuidar a los recién llegados. Los lleva a pasear, juega con ellos e incluso, hasta podría haber “malcriado” a algunos con sus “mimos”. “Cada uno de los animalitos del zoológico tiene su carácter, algunos son caprichosos, otros son muy consentidos”, dijo.

Cortesía Zoológico de Guayllabamba (Max Araujo Fotografia)

Aunque recuerda muchas historias, por ahora Lucas, un venado rescatado del tráfico ilegal de animales, ocupa su atención. El animalito sabe que Heidi está pendiente de él y responde a su voz con alegría.

Heidi reconoce que esta labor es ardua e incluso recibía reclamos de su hijo, quién no entendía su compromiso con el trabajo; sin embargo, ahora que tiene 12 años muestra curiosidad por su labor y es un visitante asiduo del “zoo”.

PUBLICIDAD

El caso de Ellie Harris es diferente. Ella es estudiante estadounidense de veterinaria, de 22 años de edad, que llegó a Cuenca para aprender más de su carrera. Desde hace dos meses se ha convertido en la madre sustituta de un mono chorongo hembra. El animalito llegó hasta Cuenca como resultado del tráfico ilegal de animales desde la Amazonía. Su presencia es fundamental para que pueda sobrevivir, ya que este tipo de especies se crían junto a sus madres desde que nacen hasta los cinco años, explicó Victoria Arbeláez, representante del zoológico.

Zoológico Amaru-Cuenca

Harris es quien le proporciona el calor necesario para su crecimiento, el cual le ayuda a mejorar para su futura reinserción, ya que llegó en un estado muy crítico, con bajo peso y su piel bastante descuidada.

Al ser pequeño, Ellie, es la encargada de darle los alimentos, cargarlo y hacerlo dormir, transmitiendo ese calor materno.

ANDREA MARTÍNEZ Y ADELA ARAUJO

PUBLICIDAD

Tags


Lo Último