El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este lunes la nueva versión de su polémico veto migratorio, que seguirá prohibiendo la entrada de refugiados al país y detendrá la emisión de visados a los ciudadanos de Irán, Somalia, Yemen, Libia, Siria y Sudán, todos ellos países de mayoría musulmana.
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La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) expresó su preocupación por el nuevo decreto migratorio de Estados Unidos que prohíbe la entrada de refugiados al país y detiene la emisión de visados para los ciudadanos de Irán, Somalia, Yemen, Libia, Siria y Sudán, todos ellos países de mayoría musulmana.
En un comunicado, la organización subrayó el «imperativo humanitario» que debe regir para los refugiados.
Recordó al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que los refugiados son «personas ordinarias que se han visto obligados a huir de la guerra, la violencia y la persecución en sus países de origen y que siguen necesitando protección urgente para salvar sus vidas.
«Sigue siendo imperativo dar protección a las personas que huyen de la violencia mortal y estamos preocupados por que esta decisión, aunque sea temporal, pueda aumentar la angustia de los afectados», señaló el alto comisionado para los Refugiados, Filippo Grandi.
ACNUR recalcó que ha sido un socio duradero de EEUU a la hora de buscar soluciones para los problemas de los refugiados, y expresó su deseo de continuar en este sentido la relación.
Reiteró su disposición a abordar de manera «constructiva» con la Administración Trump todos los programas de refugiados para asegurar que cumplan los estándares más elevados de seguridad.EFE