Tylah Durien, estudiante de estética, decidió teñirse las cejas y pestañas en casa, pero lo que ella creía que era un tratamiento para embellecerse terminó siendo una emergencia médica.
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La chica decidió pasar por alto realizar la prueba del parche sobre su piel, por lo que cuando aplicó los químicos sobre su rostro sintió un leve escozor. Aún cuando creía que eso era normal finalizó la sesión de belleza, y al terminar se sintió satisfecha con los resultados.
Minutos después de finalizar con su teñido de cejas y pestañas notó cómo rápidamente su rostro comenzó a hincharse y sus ojos comenzaron a segregar pus.
Según reseña chapintv, la piel alrededor de sus cejas se tornó roja y con ampollas, mientras que sus pestañas comenzaron a caerse. Como consecuencia, Durien tuvo que ser hospitalizada y los médicos descubrieron que sufrió una reacción alérgica a uno de los productos del tinte, la parafenilendiamina (PPD), un componente común en el producto para cabello.
La reacción es grave, ya que sufrió quemaduras químicas, aunque médicos aseguran que corrió con suerte porque no quedó ciega. Los médicos advirtieron que no debe utilizar tintes otra vez.