Las condiciones sensibles del ser humano se fortalecen en diciembre. Ese sentimiento se puede traducir en depresión. Navidad y Fin de Año son dos festividades que conjugan la familia.
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Sin embargo, la falta de esas personas en la vida pueden causar depresión en algunas personas. Gabriela Mena, psicólolga, manifiesta que en diciembre existe un disparo, incluso, en intentos de suicidios.
Ella hace recomendaciones para evitar que la depresión se apodere de la gente en diciembre. Entre ella, por ejemplo, tratar de perdonar a amigos y familiares para lograr la tranquilidad.
Síntomas básicos de la depresión
Dos síntomas son los básicos para que el paciente acuda al médico, la tristeza incontrolable y la incapacidad de sentir placer. A partir de estos, el profesional podrá iniciar una charla que le permitirá definir si el paciente tiene o no depresión.
Ninguna señal, recalcan los expertos, se puede tomar a la ligera o pensar que es solo por “llamar la atención”. La depresión es una patología que se puede desencadenar por cualquier motivo, y los índices de esta enfermedad se disparan en diciembre.
Incluso, la depresión puede llegar a que las personas atenten contra su propia vida. Según el INEC, en el 2010, un total de 658 personas se quitaron la vida a nivel nacional, mientras que en el 2011 hubo 913 suicidas, convirtiendo a este problema en una de las primeras 15 causas de muerte en Ecuador.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que aproximadamente un millón de personas se suicidan en el mundo, cifras que para el 2020 podría llegar a 1,5 millones de víctimas. La organización calcula que por cada muerte atribuible al suicidio se producen entre 10 y 20 intentos fallidos.
Las desigualdades sociales y la ausencia de familiares en la cena navideña son causas de la depresión en diciembre. Esas serían las dos razones que no pueden solucionarse.
