Un hombre de 36 años llevaba dos décadas en el sótano en condiciones higiénicas lamentables, según reportaron las autoridades policiales de Sao Paulo, cuando en una redada por drogas, encontraron a Armando Bezerra de Andrade, de 36 años de edad, en un sótano maloliente y sucio.
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Los agentes ingresaron a la casa de la familia por error, cuando descubrieron la imagen de la habitación muestran un colchón manchado, ventanas con candado y ninguna fuente de luz. La puerta no tenía manija en el interior.
Su padre, Armancio Bezerra, dijo que mantuvo a su hijo en el sótano porque consumía drogas, y contradijo a los vecinos que dijeron que el hombre había estado allí desde que tenía 16 años.
La policía dice que están investigando si pudo haber estado encerrado durante 15 años, mientras que los vecinos afirman que estuvo preso en la casa familiar por hasta 20 años.
Según CNN, las autoridades reportaron que el joven se encontraba muy débil y se levantaba con dificultad. Además, añadieron a la descripción que el olor en la habitación era horrible ya que la víctima había orinado y defecado en el mismo lugar.
De su lado, los vecinos se habrían ofrecido a dar declaraciones, y habrían pintado la pared exterior de la casa exigiendo justicia.