Pese a que el actor Benedict Cumberbatch agradece las muestras de cariño de sus fans, en esta ocasión fue distinto. Aunque ellos lo convirtieron en uno de los actores más celebrados en las redes sociales, tampoco ignora el hecho de que algunos tienen una actitud posesiva. Incluso se niegan a reconocer que su ídolo está casado y tiene un hijo. Esto le resulta al actor verdaderamente «aterrador».
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«Hay gente que piensa que mi mujer es una artimaña publicitaria. Y que mi hijo también es parte de la estrategia, que no es real». Además dijo: «Creo que tiene que ver con todo ese concepto de ser el ‘novio de internet’, no puedes pertenecer a nadie más. Solo a los fans de internet».
Al respecto también expuso: «Es imposible que esté con alguien que no sea yo. Y eso ya es acoso. Es un comportamiento obsesivo, delirante y muy aterrador», reveló el protagonista de la serie «Sherlock» en una entrevista a «Vanity Fair».
Gracias al famoso detective que interpreta, en la vida real Benedict se ha convertido en todo un sex symbol. Aunque esta etiqueta para nada le preocupa al británico.
«Yo no me miro al espejo y digo: ‘Sí, por supuesto, ¡entiendo que me dediquen todos esos piropos!’. Sigo viendo todos mis defectos como siempre he hecho», asegura.
Sin embargo, el actor se asombra de haberse convertido en uno de los hombres más deseados del mundo. Esto gracias a su profesión. Después de que fuera precisamente su pasión por la interpretación lo que hizo que, durante parte de su adolescencia, se cuestionara su orientación sexual.
El actor recordó su primer papel…
«Mis compañeros dieron por sentado que era gay porque me gustaba el arte». También, recordó durante la misma entrevista, su primer papel en el teatro. «Fue el de la reina de las hadas Titania en ‘El sueño de una noche de verano'». «La primera vez que subí al escenario delante de un público masculino en el colegio fue vestido de Titania, la reina de las hadas, con una peluca y una piña como corona».
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Con información de Bang Showbiz
