El alcalde Jaime Nebot, durante una entrevista radial, el miércoles 30 de diciembre, aseguró que las obras que se ejecutan en Guayaquil seguirán su curso normal, a pesar de las dificultades económicas que presenta el año 2016, y que los compromisos adquiridos durante la campaña pasada se cumplirán puntualmente.
El jefe del Cabildo porteño atribuyó su anticipación al buen manejo administrativo implementado por su gestión que destina el 85% a la obra y servicio público y tan solo el 15% a gastos corrientes y administración, lo que ha permitido que pese a la crisis económica el Municipio de Guayaquil incremente su presupuesto anual a 717 millones 200 mil dólares para el ejercicio 2016.
En este sentido, aseguró que se continuará “con los pequeños lunares” en la ciudad donde no existe agua potable, proveyendo este servicio, al recordar que existe un 99% de cobertura de agua en la ciudad. Igual, al hablar del alcantarillado, después de hacer alusión al 60% de cobertura que tenía la urbe porteña antes de asumir el Cabildo su competencia, se ha incrementado, con más de 800 mil personas incorporadas al servicio, hasta cubrir por sobre el 95%, estando ya contratado lo que falta, especialmente en el sector de la Perimetral hacia el oeste.
También la pavimentación popular continuará con su ritmo de implementación regido por la instalación del alcantarillado, pues donde termina el alcantarillado se inicia la pavimentación, pues de lo contrario, dijo, significaría romper nuevamente las calles recién construidas para colocar la tubería de drenaje, lo que implicaría un mayor costo al erario del pueblo, que no otra cosa es el presupuesto municipal que financia la obra. Sin embargo, indicó que se están construyendo soluciones viales provisionales para no dejar a importantes sectores poblacionales aislados, mientras llega la obra definitiva.
“La obra pública, en general, la regeneración urbana, continúa llegando a todos los rincones y barrios de Guayaquil. La política de creación de parques es muy agresiva. Estamos en los 1.800 parques, casi hemos cumplido los 9 metros cuadrados de área verde por habitantes que es una de las metas del milenio. Guayaquil marcha muy bien en ese sentido”, ha puntualizado.
De igual manera, avanzan los programas de educación, textos gratuitos, laboratorios de computación, tablets, becas para los niños huérfanos, los estímulos, como Jóvenes Ejemplares, que “van a continuar sin problemas”.
Cumplimiento de los compromisos
En este punto, recordó las grandes obras que constituyeron “compromisos de campaña” y que se encuentran en plena licitación, contratación o ejecución, como, dijo, el puente que unirá a Samborondón con Guayaquil, que una vez obtenida la licencia ambiental requerida por ley, está a punto de comenzar su ejecución en los próximos días, prevista para concluirse en 18 meses.
La mega planta de tratamiento de aguas negras está en plena licitación y totalmente financiada y su funcionamiento beneficiará a más de 1 millón de personas. El terminal terrestre satelital de la vía a Daule será inaugurado en febrero del año entrante. También ya están contratados los estudios para el nuevo aeropuerto intercontinental de Guayaquil en Daular, así como su nueva vía alterna.
La rueda moscovita, de más de 50 metros de altura, y su centro de diversión, en el Malecón Simón Bolívar, están en construcción y se espera su inauguración entre los meses de julio y octubre del año que viene y se lo vaticina como un nuevo atractivo turístico para Guayaquil.
En proceso de licitación se encuentra el nuevo sistema de transporte aéreo suspendido, la Aerovía, que ya ha recibido las ofertas de dos de las empresas internacionales más grandes y especializadas del mundo y su implementación, una vez concluido el proceso de adjudicación, tendrá una duración de 2 años.
Este nuevo sistema de transporte público, a más de constituirse en una moderna respuesta a la movilidad urbana, también constituye una solución al problema del atasco vehicular en los sectores del puente de la Unidad Nacional y de la Avenida Pedro J. Menéndez Gilbert. También se adelanta en la ampliación de la Metrovía en el sector del suburbio porteño.
“Dedicarnos de lleno a la solución de los problemas de tránsito que los heredamos de hace 60 años, y que no se pueden solucionar, obviamente, con cinco meses de labores de la nueva Empresa Municipal de Tránsito, pero, en fin, todo esto está andando, todo esto está financiado, todo esto va a generar optimismo, autoestima, trabajo, movimiento económico en la ciudad de Guayaquil, en el área en que nosotros queremos aportar”, ha señalado.
En este sentido, un gran aporte al movimiento económico de la ciudad lo constituyen los programas habitacionales municipales, que “lo seguiremos haciendo este año”.
Los impuestos prediales
Respecto a los impuestos prediales correspondientes al 2016, el alcalde porteño explicó que existe un gran tramo, de más de 430 mil contribuyentes a quienes se les rebajó en un 20% sus aportaciones a partir del 2014, que mantendrán su rebaja; así mismo, existe otro tramo, al que no se le rebajó y se mantuvo su nivel de contribución que seguirán pagando exactamente lo mismo; y, un tramo sensiblemente menor, al que se le rebajó un 10%, que volverán a contribuir con los valores que pagaban en el 2013, es decir, subrayó, no se han aumentado los impuestos, los que, aseguró, son los más bajos de las ciudades del país.
Ejemplificó esta última aseveración apuntando que si se hace referencia a los impuestos que se pagaban en el 2000 y se les suma el factor inflacionario, que no es otra cosa que el valor de depreciación del dinero, en términos reales, se notará que se paga menos impuestos.
“Esto es una política nuestra… …tenemos una política tributaria recaudatoria eficiente, con el 97% de recaudación para que funcione la administración, pero no como un castigo al ciudadano, no como un traslado del dinero del bolsillo del ciudadano a un estado nacional o local ineficiente. Al revés, creemos que en épocas de crisis es cuando más debemos cuidar aquello para poner dinero en el bolsillo de los ciudadanos, para que el ciudadano pueda funcionar, crecer, invertir, mover la economía”, ha definido.
Al finalizar, después de expresar sus buenos deseos por la recuperación económica del país y un buen año para todos los ecuatorianos, teniendo como referencia éste, reflexionó: “Si cada ecuatoriano, desde su lugar de contribución al país, privado o público, pequeño, mediano o grande, hiciese lo que tiene que hacer y lo hiciese bien y con dedicación, este sería un gran país, que lo es, pero que no llega a sus límites de crecimiento de nivel de vida, porque hay fallas humanas, en algunos sectores, que tienen que corregirse, porque el esfuerzo lo tenemos que hacer todos y en el fondo, un país es la suma de individualidades, de voluntades, de cumplimiento de deberes públicos y privados, desde distintos ángulos. Esta es una época de liderazgo colectivo, y si este liderazgo colectivo funciona, el Ecuador no tiene nada que temer y este es uno de los grandes deseos que tengo para el 2016”.
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