Sindicatos, colectivos indígenas y otras organizaciones sociales de Ecuador volverán este jueves- 24 de agosto- a las calles a protestar contra ciertas políticas del Gobierno y por la defensa de la Unión Nacional de Educadores (UNE), gremio de maestros sometido a un proceso de disolución.
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El denominado «Colectivo Unitario», que congrega a las principales centrales obreras, un sector del movimiento indígena y otros grupos sociales, convocó a la manifestación nacional contra el desempleo, el alto costo de la vida y la supuesta persecución del Gobierno contra los «luchadores populares».
A esas demandas se sumó en las últimas horas la defensa de la UNE, el sindicato del magisterio con más de 60 años de vida, sometida a disolución por haber incumplido la normativa vigente para el funcionamiento de las organizaciones sociales, según el Gobierno.
El grueso de la movilización se concentrará en Quito, aunque se prevé que haya manifestaciones en otras jurisdicciones del país.
A la par, se espera que las organizaciones sociales afines al Gobierno del presidente Rafael Correa se congreguen en la plaza de la Independencia para respaldar al régimen y defender la democracia de, según el oficialismo, los intentos desestabilizadores de la oposición.
Los sindicatos y el Gobierno también pugnan por la chapa de «izquierda» que cuelgan en sus pabellones y que en el principio de la Administración de Correa les alió de manera fugaz.
La movilización sucede a otras organizada por las centrales sindicales que se han repetido en los dos últimos años bajo la consigna de «Fuera Correa, fuera», también acuñada por la oposición de derechas.
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La acción de protesta fue decidida a principios de agosto durante una «Convención Nacional del Colectivo Unitario de Trabajadores, Indígenas y Organizaciones Sociales», cuando esos grupos acusaron al Gobierno de un mal manejo de la economía y de llevar al país a la crisis, extremo que niega la administración central.
Los sindicatos también exigen el respeto a la libre asociación, la contratación colectiva y la estabilidad laboral, además de una «Reforma Agraria Integral en beneficio de los indígenas, campesinos y trabajadores del campo».
La protesta del «Colectivo Unitario» se da también en medio de un ambiente preelectoral que vive el país, de cara a los comicios presidenciales y legislativos del próximo 19 de febrero, proceso en el que Correa no se presentará a una nueva reelección, aunque, según encuestas, el mandatario goza de una amplia simpatía entre la población