El diario Daily Mail cuenta la historia de Wu, una joven china de 23 años. Ella puso fin a su embarazo al enterarse que su bebé tenía el síndrome sirena, que es una malformación de piernas que se fusiona y da la apariencia de una cola.
PUBLICIDAD
Los médicos descubrieron que el feto tenía esta malformación a los seis meses de embarazo. Además de esto, el bebé no tenía vejiga y tenía varios retrasos en su crecimiento como era el caso del hígado.
El bebé tenía tantos problemas que los médicos informaron a la madre de que solo viviría unas horas después de nacer.
Las causas de este síndrome son todavía un misterio. Si que hay documentado el caso de Shiloh Pepin, una niña americana que nació con este síndrome y que después de 150 operaciones falleció a los 10 años de edad.
