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Ecuador trata de introducir en el mercado ruso algunos productos no tradicionales de sus exportaciones como lácteos, aprovechando el hueco creado por el veto de Moscú a los países europeos.
«Desde hace un año estamos trabajando con Rusia para que varias empresas productoras de lácteos en Ecuador puedan ingresar en Rusia, principalmente quesos crema», dijo a Efe Andrei M. Karpov, director de ProEcuador, la oficina comercial ecuatoriana.
«Ya ha habido contactos y se prepara para octubre la visita a Ecuador de las autoridades fitosanitarias rusas para realizar las inspecciones pertinentes», agregó.
Ecuador pretende aprovechar así el espacio que se ha abierto en Rusia desde la introducción los últimos años del veto a países de la Unión Europea por las sanciones impuestas a Moscú a raíz de la crisis de Ucrania.
Precisamente, con el fin de promocionar estos productos, entre otros, una misión comercial de 12 empresas ecuatorianas participará el próximo septiembre en la feria Word Food Moscow, la mayor de este tipo en la capital rusa.
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Además de los lácteos, se insistirá en esa feria en la promoción de las exportaciones más tradicionales, como son el banano, café, productos de pesca y camarón.
Karpov destacó que la relación comercial entre Ecuador y Rusia se mantiene de forma «muy positiva», especialmente en lo que se refiere a los dos principales productos de exportación, banano y flores.
Ecuador es el segundo socio comercial para Rusia, que importó en 2015 productos por valor de 1.300 millones de dólares, solo por detrás de Brasil y por delante de Argentina, según datos de la Comisión Económica Euroasiática.
El país andino es el principal proveedor de banano y flores a Rusia, después de que la flor ecuatoriana adelantara a la holandesa tras la disminución de las importaciones del país europeo.
También han experimentado crecimiento en el mercado ruso los vegetales congelados, el pescado y el camarón.
«Ahora estamos tratando de promocionar productos con valor añadido, como el café empaquetado y etiquetado, chocolates y derivados de cacao o banana chips», señaló el agregado comercial ecuatoriano.
En cuanto a las flores, que se mantienen en primer lugar a pesar de que Rusia disminuyó sus importaciones debido a la crisis, Ecuador participará en septiembre en la mayor Feria de Flores de Moscú y antes, en agosto, en una feria de plantas, con el objetivo de «mantener el mercado y mostrar las nuevas tendencias, nuevos colores etc», agregó.
El responsable ecuatoriano consideró que la crisis en el mercado ruso empieza a remontar debido, entre otros factores, a que hay una mayor estabilidad en el tipo de cambio tras dos años de fuerte depreciación y fluctuación del rublo.
«La situación con el tipo de cambio en 2014 y 2015 nos afectó mucho, pero ahora las empresas rusas ya se arriesgan a hacer negocios, están más confiadas y por eso se nota la recuperación», dijo.
Por otra parte, señaló que tanto las flores como el banano «son productos que entran muy bien, sin problemas, tienen reconocimiento y salida y por ello queremos ampliar el mercado a toda la comunidad económica euroasiática».