Las adolescentes en Australia fuman durante el embarazo con el fin de que el bebe sea más pequeño, advierte un estudio realizado por Simone Dennis, profesora asociada de la Universidad Nacional de Australia.
PUBLICIDAD
Según la experta, que publicó sus conclusiones en el libro “Smokefree”, las jóvenes de tan solo 16 años se someten a técnicas extremas para reducir el tamaño de sus bebes nonatos. La finalidad es que así tengan un parto menos doloroso.
La idea de utilizar el cigarro –indica la investigación– se obtuvo de las mismas cajetillas, las cuales advierten que el fumar puede hacer que el peso del recién nacido sea menor de lo normal.
“Ellas tenían miedo porque eran pequeñas. Lo peor que les puede pasar era tener un enorme bebe”, declaró Dennis al diario “The New Zealand Herald”.
La investigación, que duró 10 años, demuestra que las madres jóvenes tienen más miedo al trabajo de parto que a las complicaciones de salud que el cigarrillo puede causar en el bebe, como asma o alergias.
Además lea: