El presidente Rafael Correa mantiene desde la tarde de hoy, 25 de abril de 2016, una reunión con sus colaboradores y el Comité de Operaciones de Emergencia (COE tras la primera etapa de acciones después del terremoto de 7.8.
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La reunión abarca temas como la reconstrucción, reordenamiento y la reactivación económica de las zonas afectadas. Esta reunión se desarrolla en el ECU911 de la capital, desde donde se están discutiendo las acciones y estrategias a seguir para dar paso a estos temas.
Las tareas van desde la remoción de escombros, la reconstrucción de las ciudades, hasta la reubicación de gran parte de la población de sitios como Pedernales. “Hay que hacer una planificación, ya estamos trabajando en eso”, informó el Mandatario.
“Lo primero era reaccionar ante la emergencia, el país lo ha hecho muy bien”, reflexionó, agregando que la institucionalidad del Estado funcionó debidamente, así como los recursos y sistemas.
«Una vez pasada esta etapa -que nos dolió a todos- la prioridad era asegurar la vida de las personas, la seguridad de los damnificados. Ya tenemos que pensar en esa reconstrucción y reactivación económica productiva», mencionó antes de iniciar la reunión del COE. Esto incluye, anunció, financiamiento, dinamización económica, reestructuración y nuevas líneas de crédito.
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“Hoy más unidos que nunca, compañeros, saldremos adelante, saldremos bien. La tragedia ha sido enorme y el dolor es muy grande”, aseveró. Tal como lo hizo en su cuenta de Twitter, el Jefe de Estado, puso énfasis en la necesidad de establecer responsabilidades en la permisividad de autoridades para autorizar construcciones inadecuadas y débiles que resultaron en trampas mortales durante el sismo.
Para esto, informó que solicitará al Fiscal la investigación “de estos delitos (pues) ha habido muertes de seres humanos que pudieron ser evitadas, no todas, cuidado, un sismo de esta magnitud va a ocasionar daños y fallecidos en cualquier parte del mundo”.
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Se debe determinar, entonces, por qué las autoridades dieron permiso para edificar con tan mala calidad, y quienes fueron los que construyeron de esta manera.
En este sentido, retomó la idea de una fiscalización que evalúe si las construcciones están siendo efectuadas de manera correcta a través de una Superintendencia de Ordenamiento Territorial incluida en el Código de Reordenamiento Territorial, con la potestad de regular que las construcciones estén en sitios adecuados y bien hechas.
