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Las líneas de crédito destinadas para capital de riesgo es un beneficio con el que cuentan los empresarios ecuatorianos. Los créditos aprobados superaron los 522 millones de dólares durante el 2015.
La finalidad de este instrumento económico permite estimular el aparato productivo de diferentes sectores de la economía y fomenta proyectos de importante transferencia tecnológica.
La iniciativa la impulsa la Corporación Financiera Nacional (CFN), con la idea de alcanzar un financiamiento que permita enfrentar condiciones económicas riesgosas, responde a la posibilidad de emprender proyectos de negocios con altísimo componente de innovación, fundamentales para el cambio de la matriz productiva.
Este estímulo al sector empresarial representa una ruptura en la lógica de asignación financiera. Históricamente se destinaba presupuesto a proyectos que posean una alta rentabilidad, despreocupando la innovación y la tecnología. En ese sentido, la medida apoya las creaciones e inventos, estimulando a los empresarios a buscar nuevas formas de desarrollar la industria ecuatoriana.
Más de 17.000 personas recibieron educación financiera, desarrollo de capacidades y asesoría empresarial, en diferentes puntos del país.
Algunos de los datos son saludables en el sistema financiero, así lo ratifica la CFN, la tarea crediticia significó más de 9.680 plazas de trabajo. Además se obtuvo un récord de 48 millones en utilidades y la calificación de riesgo se ubicó en AA+, como reflejo de la mejoría en los indicadores y servicios financieros de la Corporación.
