Según la ciencia, el queso es tanto o más adictivo que muchas drogas. Esto fue comprobado por un estudio dirigido por la Universidad de Yale-Estados Unidos-y publicado en la revista TechTimes.
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Según los expertos el queso tiene una alta capacidad para generar comportamientos adictivos entre sus consumidores gracias a su alta concentración en caseína.
Esta fosfoproteína, presente en los productos lácteos y sus derivados pero especialmente presente en el queso, es capaz de activar los receptores opioides del cerebro y que están asociados a las adicciones.
“La caseína es capaz de estimular los receptores de dopamina y desencadenar una adicción”, explicó el dietista Cameron Wells, quien equiparó este tipo de estimulación a la que producen los opiáceos como la morfina o la codeína.
Por tanto, la investigación demostró que los niveles de adicción que puede provocar el queso son mayores a los de muchas drogas.
Con información de códigonuevo.