Una muerte casi inexplicable encontró un hombre de 25 en Hawai luego de caer más de 120 metros por un precipicio.
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Nathan Stowell caminaba por un peligroso sendero cuando el viento le voló el sombrero, señala Daily Mail.
El joven salió de inmediato en su búsqueda, mientras sus amigos le gritaban que no lo hiciera, casi anticipando lo que estaba por venir.
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“Comenzó a deslizarse cuesta abajo, siguió y siguió”, dijo uno de los muchachos que lo acompañaban y que vieron cuando resbaló y no pudo aferrarse a nada para mantenerse en el sendero.
Tras recibir el aviso e emergencia, los equipos de rescate tardaron dos horas en llegar al cuerpo de Stowell debido a la vegetación reinante en el lugar y cuando finalmente lo encontraron ya no respiraba.
“Murió de la manera en que vivía, arriesgándose y viviendo todos los días al máximo”, escribió uno de sus amigos en Facebook, mientras que otro señaló “¡Vuela alto hermano! Te extrañaremos muchísimo”.