Estilo de Vida

5 formas de reconocer a un infiel

Infieles situacionales o crónicos, existen personas más propensas a engañar a sus parejas. Todos los signos a los que hay que prestar atención, y las razones que llevan a las personas a ser infieles

Según un estudio realizado por la Universidad de Indiana, las personas ansiosas, inquietas y grandes perseguidores de novedades son las más propensas a ser infieles con sus parejas. Sin embargo, aspectos como la educación, ideologías, valores y creencias no deben perderse de vista.

PUBLICIDAD

En diálogo con Infobae, Gabriela Rougier, psicóloga especialista en terapia de parejas explicó: «Existen personas más propensas a ser infieles con sus parejas y hay una explicación desde la neurología».

Según resultados arrojados por un estudio de tomografía de cerebro realizado en la Universidad de Stony Brook en Nueva York por el psicólogo Arthur Aron, en el sistema de enamoramiento del cerebro se activan las mismas áreas cerebrales de gratificación que cuando se consume cocaína. La sensación adictiva parece no alcanzarle a muchos y necesitan revivirla una y otra vez.

Según la experta, en observaciones realizadas en el cerebro de personas enamoradas correspondidas, no correspondidas y engañadas se pueden percibir tres sistemas de cableado:

El primero tiene que ver con el amor apasionado que trata de un impulso sexual, una necesidad como una comezón que te lleva a buscar parejas sexuales. Tiene lugar en los primero meses de una relación.

En segundo lugar, el romántico, donde el enamoramiento hace que todo parezca idílico o hermoso, tiene lugar en las primeras etapas de una relación como lo es el primer año.

Y por último el del apego a largo plazo, se observó en relaciones amorosas más maduras que tiene lugar cuando esa relación se asienta. «Para los humanos la primer figura de apego son nuestros padres y la segunda nuestra pareja, nuestras fuentes de seguridad y bienestar», agregó la especialista.

PUBLICIDAD

«Hay personas que pueden focalizar los tres sistemas en una única relación. Sin embargo, hay otras que necesitan hacerlo por separado ya que no lo consiguen todo a la vez», advirtió.

Para Diego Luparello, psicoanalista y ex-presidente del Claustro de analistas en formación de la APA, no todas las personas tienen la misma valoración de la fidelidad, y aún no todas las personas piensan lo mismo a lo largo de sus vidas.

Existen varias características que comparten quienes son infieles o un cierto patrón de conductas que se repite. Sin embargo, no significa que quien las tiene sí o sí sea infiel. Cuáles son indicadores que dan cuenta de alguien que es infiel a su pareja:

Falta de interés y actividades por separado

Si bien es un indicio muy evidente, la falta de interés puede ser confundida por un exceso de trabajo o estrés. Sin embargo, difieren en la duración, ya que difícilmente el estrés esté presente todo el tiempo en el hogar.

«Los infieles buscan inventar actividades que no incluyan a la pareja o que al otro ‘no le diviertan’, para conseguir unas horas a solas», advirtió la psicóloga especialista en parejas.

Cambio repentino de intereses

Se muestran cambios abruptos en lo que refieren los gustos de la persona, ya sea en la música, la manera de vestir o nuevos intereses por comidas y vinos.

Conversaciones privadas

Las explicaciones acerca de quién estaba del otro lado del teléfono o quién podría haber enviado ese mensaje a altas horas de la madrugada terminan por delatar al inculpado. Es en ese momento donde el subconsciente se siente culpable.

“Quien tiene algo que esconder se aferrará a a su teléfono celular como si fuera una especie de tesoro, no lo perderá de vista ni por un minuto”, insistió Rougier.»

Cambios de humor

Cualquier cosa hace que el acusado se irrite. Los acercamientos físico en el momento inadecuado lo harán explotar. Comienzan las excusas a la hora de intimar con la pareja y las frases como ‘tengo mucho trabajo’ o ‘hoy estoy muy cansado’ se vuelven cotidianas.

Modificaciones de rutina

Los horarios para ir al ‘trabajo’ sufren modificaciones de último momento, los nuevos horarios para salir de casa, como de llegar se vuelven permanentes y la puntualidad es un factor esencial.

«De todos maneras, no todos los sujetos atraviesan una situación de engaño de la misma manera. Hay quienes con cierta culpa suelen vivir con incomodidad toda la situación, y entonces aparecen las conductas extrañas y otros que viven la transgresión sin tanta tensión, y entonces estos indicadores mencionados no aparecen», insistió Luparello.

Dos tipos de infieles

El infiel situacional es aquel que fue infiel por una crisis vital o personal que nada tuvo que ver con la pareja. Actúan luego de hechos movilizantes, como lo es la muerte de un ser querido. Se cuestionan el sentido de la propia vida y se revelan. ¿Esto es todo? ¿O me voy a permitir vivir?

El infiel crónico es infiel únicamente por el placer de la conquista. No puede renunciar a la adrenalina que le brinda seducir y enamorar. «Este tipo de personas llegan a la terapia de pareja no porque están realmente arrepentidos sino porque la pareja se lo exija», mencionó.

Como fruto de la inseguridad

«La mayoría de las infidelidades tiene su origen en la inseguridad. Las personas que creen que no son dignos de ser queridos por sus parejas se cruzan en su camino con quien los hacen sentir seguros o simplemente distintos y rompen con el pacto de fidelidad», añadió.

“Establecer un vínculo, ya sea por única o repetidas veces, con alguien que nos diga o ponga en el lugar que queremos estar va a hacernos olvidar por momentos de esa inseguridad”.

En general, el inseguro suele estar muy pendiente de la mirada de su pareja. En estos casos, el acto de infidelidad en sí no tiene que ver con la otra persona si no con uno mismo

Infobae 

PUBLICIDAD

Tags


Lo Último