En la sociedad actual, la mayoría pasa largas jornadas dentro de una oficina con el único objetivo de tener un salario decente y poder vivir en un mejor hogar o cubrir sus gustos personales.
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Pero, ¿qué pasaría si le dedicáramos menos tiempo a las obligaciones y decidiéramos consentirnos con un día entero sin hacer nada?
De acuerdo a las declaraciones del autor del libro “DESCANSO: Por qué obtienes más cuando trabajas menos”, Alex Soojung-Kim Pan, probablemente seríamos más exitosos.
“Figuras como Charles Dickens, Henri Poincaré e Ingmar Bergman, que trabajaban en campos diferentes y en épocas distintas, compartían una gran pasión por su trabajo, una profunda ambición por ser exitosos y una habilidad única de concentrarse. A pesar de ello, solo pasaban algunas horas al día trabajando.”, indica Soojung-Kim.
Es decir, entre más tiempo dediques a tus gustos personales como hacer la siesta, pasar la tarde entera viendo Netflix o simplemente no hacer nada, tu creatividad y productividad probablemente mejorará durante las horas que sí le dediques al trabajo.
“Algunas de las figuras más importantes de la historia no dedicaban largas hornadas a sus ocupaciones”, aseguró el autor.
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