La llamadas “crisis” de edades existen. Aunque los factores que intervienen son variados, lo cierto es que cada nueva etapa en la vida trae consigo una nueva serie de retos, problemas y responsabilidades tanto personales como profesionales para los que se puede estar o no preparada.
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Ahora, las mujeres son las más “afectadas” por estos altibajos y, según señalan los últimos reportes presentados en las conferencias de la Cumbre por el Cambio Femenino, hay incluso una década a la que se califica como la edad más difícil de todas: la de 20 a 30 años.
“Es un tiempo problemático en el que las féminas deben decidir sobre la maternidad, y todo lo que implica, con las presiones familiares y sociales. También están las ambiciones personales y cómo influyen en las metas laborales y los proyectos exitosos que se logren. Sumado, esto crea grandes expectativas y cargas emocionales en cualquiera”, explica Wendy McCarthy, una de las emprendedoras que participó en el estudio.
De igual forma, la edad más difícil para ser mujer abarca el lapso que, sustentado en las estadísticas, se dan la mayoría de experiencias profesionales, por lo que muchas comienzan a cuestionarse si llegarán a alcanzar un balance, y otras se comparan con el género masculino y las facilidades que tienen.
Sin embargo, la abogada australiana y editora de Women´s Agenda Elizabeth Broderick, comenta que entre los 20 y los 30 es un período en que se establecen conexiones más duraderas, se tiene más tiempo para realizar actividades de disfrute y para proseguir estudios, ya que se tiene algo de independencia financiera.
Con información de El Nacional
