La fiebre mundial por Pokémon Go ha llevado a muchos usuarios latinoamericanos a instalar el juego lo por «otros medios», tanto en iPhone como en Android, aunque no esté oficialmente disponible en su país.
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Seguramente han notado que, aunque el juego no aparece todavía en la App Store o Play Store, una gran cantidad de latinos ya lo disfrutan.
Esto se debe a que lo están descargando tanto en forma de archivos apk para Android, como a través de «VPN» o cuentas falsas de iTunes para iPhone.
Esto conlleva un gran riesgo para los usuarios, pues dichas versiones -excepto a través de App Store- pueden contener virus que se encargan de robar los datos de sus teléfonos celulares o causarles algún daño.
Hablando específicamente de la opción que muchos usuarios de iPhone están eligiendo y se trata de crear una cuenta falsa de iTunes, esta viola, expresamente, los términos de la compañía.
Dicho «truco» se trata de poner datos falsos en la nueva cuenta respecto a su ubicación, para engañar al sistema y que les permita descargar apps que están disponibles en otros países, entre estas Pokémon Go.
Pokémon Go Foto:
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En los términos de servicio de Apple podemos leer:
“El Servicio iTunes está disponible para usted sólo en Estados Unidos -o cualquier otro país que hayan seleccionado como residencia-. Usted acepta no utilizar o intentar utilizar el Servicio iTunes desde afuera de este sitio. Apple puede utilizar tecnologías para verificar su cumplimiento”.
Por el momento no pueden fiarse ni de la Play Store
Recientemente, la compañía de seguridad cibernética «ESET», informó que ha encontrado una aplicación falsa en la Play Store de Android.
Su nombre es «Pokémon Go Ultimate». Por la similitud con Pokémon Go, engaña a los usuarios haciéndolos creer que se trata de la app oficial.
Una vez instalada, bloquea la pantalla del teléfono celular completamente y la única manera de volver a usarlo es mediante un reinicio forzado. Esto puede dañar su dispositivo.
Por estas razones, la mejor opción es esperar a que el juego sea liberado oficialmente en América Latina y no arriesgarse con las opciones alternativas que pululan en la Web.
