Si tienes wi-fi en tu casa, seguro que en más de una ocasión, el suministro de tu red inalámbrica se interrumpió. Y, probablemente, tu primera reacción haya sido ir hacia el router, desenchufarlo, esperar unos segundos, volver a conectarlo a la corriente y esperar que todo vuelva a la normalidad. Pero, en realidad podrías estar cometiendo un error.
PUBLICIDAD
Especialistas recomiendan no desenchufar el router antes de haberlo apagado.
Gran parte de los routers que funcionan en los hogares actuales son considerados antiguos ya que no están diseñados para cumplir con la demanda de los dispositivos actuales: computadoras, tablets, smartphones, smart tv’s, consolas de videojuegos y lo que se te ocurra.
Al ser consultado por Las Últimas Noticias, de Chile, el Country Manager de D-Link, Claudio Torres, explicó que estos equipos pasan por estados en que su capacidad máxima se ve sobrepasada y que eso los hace trabajar más lento.
Entonces, si desconectarlo del suministro eléctrico está mal ¿qué hago?
El especialista explicó que lo mejor es apagar el router desde su interruptor, haciendo que todos los procesos pendientes del dispositivo se eliminen de la memoria de éste y todo comience desde cero, eliminando el exceso de trabajo.
Además, el profesor de Ingeniería Telemática de la Universidad Santa María, Werner Creixell, explicó al mismo medio que: “Al apagar el router con el interruptor garantiza el apagado seguro del equipo, pues parte de la circuitería sigue conectada a la electricidad. Esto no ocurre al desenchufar el equipo, es por ello que la secuencia debe siempre ser apagar con el interruptor y luego desenchufar.”
Los expertos explican que lo ideal es apagar el router durante unos 30 segundos, para dejar que la energía que estos aparatos guardan para salvar esta información en caso de emergencias se acabe y, por ende, se desechen los datos de los que queremos deshacernos para poder volver a cero.