Ya son dos años del grave padecimiento médico que sufrió una de las cantantes de pop más famosas del mundo. Shakira tuvo una hemorragia en las cuerdas vocales, que la alejó de los escenarios y obligó a guardar estricto reposo.
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Ese silencio le llevó a tener problemas con su actual pareja y padre de sus hijos, Gerard Piqué. La colombiana confesó que la mayoría del tiempo pasaba amargada y era muy pesimista, lo cual sumía en la desesperación al futbolista español.
Uno de sus mayores miedos era perder su voz y ver, así, culminada su carrera musical. Además, los diagnósticos médicos no eran muy alentadores para la “cafetera». Incluso, su relación con sus hijos estaba corriendo peligro.
Shakira recurrió a varios métodos, incluso poco ortodoxos para recuperar su salud (voz). Según confesó a un medio británico, la hipnosis, meditación y peregrinación para recoger agua bendita fueron las drásticas medidas que hizo la interprete de “Loba” para que se le cumpla el milagro de recuperar su salud.
Declaraciones
“Necesitaba cirugía o intervención divina”, resume ella. Finalmente alguna de esas opciones acabó funcionando y recuperó su voz sin necesidad de pasar por quirófano en lo que ella define como una “experiencia religiosa”.
Actualmente, el semblante de Shakira ha cambiado e incluso se prepara para presentar su documental “El Dorado World Tour”. Ahí se narra los momentos más duro de su carrera, entre ellos este último suceso que casi termina con su vida musical.
