El príncipe Harry y Meghan Markle viven en la casa real ubicada en Nottingham Cottage, en el Palacio de Kensington, Londres.
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Como publica la prensa británica, se trata de la casa más pequeña dentro del complejo real.
La vivienda tiene 120 metros cuadrados y cuenta con dos dormitorios, un baño, dos salas de recepción, una cocina, sala de estar y un jardín en la parte posterior.
El hijo de Lady Diana llevaba desde 2013 viviendo solo en Nottingham Cottage, y Markle se mudó a esta casa tras el anuncio de su compromiso, en noviembre de 2017.
Fue en esta vivienda en la que Harry le propuso matrimonio.
EL CASTILLO ERA VIVIENDA DE LOS DUQUES DE CAMBRIDGE
Nottingham Cottage fue también el hogar de los duques de Cambridge. La familia real vivió allí de 2011 a 2013.
Después de dos años de convivencia se trasladaron a un piso de 20 habitaciones dentro del palacio tras el nacimiento del príncipe Jorge.
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¿SE MUDARÁN AL ‘REGALO DE BODAS’ DE LA REINA ISABEL?
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A pesar de que han pasados más de dos meses de la boda de Harry y Megha, la Reina Isabel los sorprendió con un regalo impensado.
De acuerdo a Daily Mail, la Reina le ofreció a su nieto y nueva nieta una propiedad que lleva por nombre ‘Adelaide Cottage’.
La mansión posee lujosas decoraciones que datan del siglo XlX, además de siete entradas y salidas cerradas hacia el palacio de Windsor.
Según el medio británico la casa cuenta con un “techo lleno de delfines dorados y adornos de cuerdas de un yate real que data del siglo XIX”.
También, tiene una chimenea greco-egipcia de mármol y será un ambiente completamente privado para los duques de Sussex ya que cuenta con varias entradas al Castillo de Windsor.
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