Grabar una película de terror puede ser una experiencia de miedo. El ambiente de suspenso puede ser una situación que puede generar problemas o miedo entre los participantes.
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Esto le pasó al director del filme, F. Javier Gutiérrez, quien en una entrevista para el portal de cine Sensacine manifestó su terror ante los acontecimientos enigmáticos que vivió durante la realización de la cinta.
Uno de ellos fue una extraña llamada de teléfono. Mientras conducía, el cineasta decidió comunicarse con su familia, y al marcar el número, una niña de unos 4 años de edad, que Gutiérrez no conocía, contestó el teléfono riendo y cantando el feliz cumpleaños.
El productor colgó y volvió a llamar a sus seres queridos. Esta vez sí fueron ellos quienes contestaron. Nunca supo quién era la niña que descolgó el teléfono.
Otro escalofriante suceso se presentó en su habitación en Atlanta, donde se llevaba a cabo el rodaje. Las moscas, que son icónicas en las películas de ‘El Aro’, aparecieron en la habitación de Gutiérrez, para quien se le hacía extraño que hubiesen moscas cuando estos insectos suelen aparecer cuando las temperaturas son más cálidas.
¿Hechos paranormales? O ¿Sugestión del productor? Nunca se está tan seguro cuando se trata de Samara Morgan, la espeluznante niña que está cobrando vida en las pantallas de cine desde el 1 de febrero.
Fuente: RCN