Scarlett Johansson está casada desde hace dos años con el publicista de origen francés Romain Dauriac y madre de una niña -tuvo a la pequeña Rose Dorothy a finales de 2014.
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Johansson lleva una temporada apeada de la fama de sex symbol que tanta popularidad le dio en el pasado. Ha racionalizado sus ritmos de trabajo, desde la vorágine que supone Hollywood, se ha centrado en su faceta más familiar y ha aprovechado el momento para explorar otros terrenos profesionales.
Hoy, 22 de noviembre, Scarlett Johansson tiene 32 años . Debutó en el cine siendo una niña de la mano de Robert Redford, pero su gran oportunidad no llegó hasta Lost in traslation, la película que la lanzó al estrellato.
Su cara a cara con Bill Murray -con peluca rosa y karaoke incluidos-, y su desbordante sexappeal hicieron que se convirtiese en el sueño erótico de medio mundo.
De ahí pasó a encabezar todas las listas de las estrellas más deseadas del momento y coronarse, dos veces, como la mujer viva más sexy por la revista Esquire -en 2006 y 2013-.
Una carrera meteórica que terminó convenciendo hasta el mismísmo Woody Allen -¿quién no se enamoró de ella en Match Point?. Nunca Johansson ha conseguido brillar tanto, aunque, de momento, se le resiste la nominación al Oscar.
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En 2007 comenzó a salir con el actor Ryan Reynolds. Rápidamente, se convirtieron en una de las parejas de moda. Se prometieron a los pocos meses de conocerte y terminaron casándose en una ceremonia discreta a finales de 2008.
Un romance express que comenzó tan rápido como acabó. En dos años ya habían solicitado el divorcio. Tras el fiasco de Reynolds, la actriz tuvo un breve romance con el también actor Sean Penn y una relación más duradera con el publicista Nate Naylor.
Tanto le gustó el sector de los anuncios que, tras terminar con Naylor, conoció al que es su actual marido, también publicista. Cuatro años lleva ya con Romain Dauriac y la relación va viento en popa.
La actriz ha entrado en una época más madura. Ha arriesgado en la vida profesional, ha sorprendido con papeles que nadie esperaba -en 2013 protagonizó su primer y comentadísimo desnudo integral en el cine gracias a la película Under the skin- y ha encontrado la estabilidad también en lo personal.
Con información de El Mundo