Irina Shayk, expareja de Cristiano Ronaldo, volvió al trabajo. Eso, luego de pasar unas vacaciones con su novio Bradley Cooper.
Shayk se hizo unas fotos artísticas, con desnudos. Fueron en blanco y negro y el encargado de hacer las fotos fue Marco Sorrenti. Las fotos fueron compartidas en Instagram y se viralizaron en segundos.
El reportaje incluye una entrevista de Ricardo Tisci, en la que Shayk da un repaso a su carrera.