PUBLICIDAD
Dos periodistas de El Comercio Perú hicieron una recopilación de los momentos más ‘bochornosos’ de las anteriores películas de Batman y Superman.
EL RETROCESO DEL TIEMPO (1978)
De todos los métodos para alterar la continuidad tiempo-espacio, este debe ser el más improvisado. Sin máquinas, ni portales; en la película ‘Superman’, el justiciero de Metrópolis vuela en sentido contrario a la rotación de la Tierra para retroceder el tiempo.
Eso no es nada, en la ‘buena idea’, al retroceder el tiempo en la Tierra no pasó nada, es decir; no hubo consecuencias.
EL SÚPER CELOFÁN (1980)
En «Superman II», luego de engañar al general Zod y sus secuaces, el último hijo de Krypton lanza un trozo de plástico que los daña. El “súper celofán” aparece de la nada y solo puede tomarse como una ridiculez. Miren al cielo. ¿Es un pájaro, un avión? No, solo es un recurso narrativo facilista.
PUBLICIDAD
¿IGNORANCIA ES FELICIDAD? (1980)
«Superman II» desarrolló el amor entre Superman y la reportera Lois Lane. Al final de la cinta, tras el peligro sufrido por ambos, el héroe la besa y, en el proceso, invade su mente para borrarle todos los recuerdos de la relación.
Este poder no solo parece sacado del sombrero y contradice todo lo que Superman representa. Jamás le pidió permiso para hacerle eso. Eso no es heróico.
«EL BATIBAILE» (1989)
Pocas cosas se le pueden criticar a «Batman», primera cinta de Tim Burton, pues estableció las bases del enmascarado para la serie animada de Bruce Timm y Paul Dini.
Sin embargo, hay algo lamentable en la primera cinta del creador de Beetlejuice, eso es el «Batdance» canción desarrollada por Prince para promocionar la cinta.
Sí, fue exitosa, pero fuera de lugar con la cinta.
LA “BATITARJETA” DE CRÉDITO (1997)
«Batman y Robin» (1997) fue tan mala que Joel Schumacher, el director, pidió disculpas a todo aquel que se pudiera haber sentido ofendido con ella.
La escena de Batman y Robin en la que asisten a una gala de temática tropical para atrapar a Mr. Freeze (Arnold Schwarzenegger), la fiesta es «arruinada» por la villana Poison Ivy (Uma Thurman), quien roba una joya y pone a Batman y Robin el uno contra el otro.
En ese momento, Batman y Robin se enamoran de la villana y todos los asistentes participan en una subasta para tener una «cita» con Pison Ivy y el ganador es Batman.
Eso no es lo más bochornoso, el lío es que Batman ofrece siete millones de dólares con la «batitarjeta» de crédito.
«LOS BATIPEZONES»
¿Hay algo más inútil que ponerle pezones a una armadura? Pues no. Ojalá alguien se lo hubiese dicho a Schumacher.
LOS CHISTES DE MR. FREEZE (1997)
El drama de Victor Fries, científico que debe congelar a su esposa para mantenerla con vida, es inexistente en «Batman y Robin», cinta que se toma en serio ser una parodia no divertida del vigilante de Ciudad Gótica.
Por alguna razón, se creyó correcto que el Freeze de Arnold Schwarzenegger no deje de hacer juegos de palabras como: «me temo que mi malestar me ha dejado ‘helado’ ante tus ruegos de piedad», «¿qué mató a los dinosaurios? ¡la era de hielo!», «este es un pueblo frío», «hoy el infierno se congela» y «vamos a romper el hielo». ¿Necesitan más ejemplos?
EL MILAGRO DE BRUCE WAYNE (2012)
Bruce Wayne se une a una secta de curaciones milagrosas. En «The Dark Knight Rises». Bane ldestroza la espalda y, con una dolorosa reacomodada de columna y una rutina diaria de planchas, Batman quedó como nuevo. Que nos presente a su quiropráctico.
EL GRAN ESCAPE (2012)
Lo último nos lleva a otra escena cumbre de Bruce Wayne en la película de Nolan. El momento en que sale del encierro tras trepar una pared para demostrar que ha vuelto a ser el héroe de siempre deja abiertas muchas preguntas.
Si la prisión estaba en medio de la nada y él solo salía con una mochila, ¿cómo hizo para llegar a tiempo a Ciudad Gótica y salvarla? ¿Buscó un teléfono público y le hizo una llamada a Alfred? ¿Tenía una «batitarjeta de crédito» para pagar el viaje? ¿Le bastaba con las millas que había acumulado? Pero la más importante, ¿qué llevaba en esa mochila?
