Para el Oscar 2016, ningún actor o actriz negra fue nominado, lo cual replica lo acontecido en 2015. Si a esto se suma la histórica mayoría de personas de piel blanca que es nominada, era previsible que algunos se quejarían.
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Este año la discusión empezó con varias semanas de anticipación y actores de piel negra están en el centro de un anunciado boicot a la ceremonia: no asistirán. Todo empezó cuando el director Spike Lee y la actriz Jada Pikett-Smith anunciaron, cada uno en sus redes sociales, que no asistirían a la entrega del Oscar del 28 de febrero por la falta de diversidad.
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“¿Es momento de que la gente de color reconozca cuánto poder, cuánta influencia hemos amasado, que ya no necesitamos pedir ser invitados a ningún lado? Rogar por reconocimiento, o pedirlo, disminuye dignidad y poder. Y somos gente digna, somos poderosos”, comentó Pinkett-Smith. El actor Will Smith, esposo de Jada Pinkett-Smith, apoyó a su esposa en el boicot.
La presidenta de la Academia de Hollywood, Cheryl Boone, dijo estar “frustrada” y con el “corazón roto” por la falta de inclusión. “Esta es una conversación difícil, pero importante, y es tiempo para grandes cambios”, dijo. Baz Bamigobye, columnistas de Daily Mail, indicó que la mayoría de películas protagonizadas por actores y actrices de piel negra “no son lo suficientemente buenas este año”.
Por otra parte, el director de cine ruso Nikita Mikhalkov consideró que el boicot es “ridículo”. “Esas cosas pasan. ¿Así que el siguiente año deberían ser solo actores negros? Entonces los blancos se molestarán”, sostuvo.
