Phil Collins pagó a su ex esposa Orianne Cevey 30 millones de euros en 2008 cuando se separaron. Ahora la pareja está planeando volver a contraer matrimonio.
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«Me refiero a Phil, de nuevo, como mi marido,» ha dicho Orianne, de 43 años, al periódico suizo SonntagsBlick. «Nos encontramos tan cerca que en realidad no importa si estamos casados. Hemos decidido hacerlo algún día por segunda vez».
Cevey ya está planeando la ceremonia y espera que sea muy diferente a la primera, en 1999, que duró tres días y costó más de 600.000 dólares. En aquel entonces la pareja disfrutó de una lujosa boda en el Rivage Hotel Beau en Lausana, en Suiza, donde acudieron más de 300 invitados, entre ellos los cantantes Eric Clapton y Elton John.
«La diferencia más importante es que ahora nuestros hijos podrán estar allí», dijo Cevey. «Me imagino que la próxima celebración será más familiar y más pequeña. En nuestra primera boda tuvimos que invitar a muchas personas para no decepcionar a nadie», añadió.
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Después de su separación en 2008, Orianne Cevey se trasladó a Miami con los hijos de la pareja Mateo, de 14 años, y Nicholas, de 11, así como con un hijo de otro matrimonio.
Collins, de 65 años, se quedó en Suiza ahogando sus penas en alcohol y llenando sus días viendo deportes en televisión, según él mismo contó al diario The Guardian. En 2009, sufrió una lesión en las vértebras del cuello, lo que afectó su mano izquierda y por eso ahora camina con la ayuda de un bastón. Collins, que comenzó su carrera musical como batería de Génesis, también tiene dificultad para tocar la batería.
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La salud al parecer ha tenido mucho que ver en la reconciliación de la pareja. El año pasado, Cevey se sometió a una cirugía de columna que la dejó con la pierna izquierda parcialmente paralizada. Durante los cuatro meses que estuvo en el hospital, Collins se trasladó a Florida para ocuparse del cuidado de sus hijos.
