Un partido decisivo se juega uno de los equipos emblemáticos de Chile, el Colo-Colo tiene por delante a la Universidad de Concepción y debe ganar para mantenerse en la primera división. Sin embargo, este cotejo se ha visto empañado por las amenazas de muerte que ha recibido el club.
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La hinchada del club chileno expuso varios lienzos fuera de la concentración del equipo con mensajes como “ganan o los matamos”. Gustavo Quinteros, extécnico de la Selección del Ecuador y actual DT del Colo-Colo, debe plantear un cotejo para evitar la catástrofe.
Quinteros, que asumió la banca del Colo-Colo en octubre pasado, cuando el club ya estaba penúltimo en la tabla, deberá gastar sus últimos cartuchos en levantar un equipo hundido, que llegará golpeado a su partido más importantes en décadas por la masiva baja de jugadores.
Reconocido como uno de los clubes más grandes del continente, el «Cacique» jugará quizás el segundo partido más importante de su historia. Esto tras la final de la Copa Libertadores de 1991 que acabó ganándole al Olimpia de Paraguay.
El triunfador del choque permanecerá en la máxima categoría del fútbol chileno mientras que el perdedor se transformará en el tercer descendido del campeonato, tras Deportes Iquique y Coquimbo Unido.
Reacción de la policía
La Policía chilena, a raíz de estos hechos, distribuyó carros blindados en las cercanías del hotel donde se concentran los del Campanil y cortó el tránsito en zonas aledañas. A pesar de los malintencionadas amenazas, también existieron hinchas que apoyaron y mostraron su fidelidad al Colo-Colo.
“Jugadores, yo les quiero recordar, Colo Colo es de Primera y de primera no se va”, gritaron los hinchas mientras enarbolaban banderas blancas y negras.
En el caso de perder el cotejo, el “Cacique” descendería de categoría por primera vez en sus casi 96 años de historia. El cotejo está programado para las 16:00 de este miércoles 17 de febrero.
