Renaud Lavillenie rompió a llorar tras volver a ser abucheado por el público del estadio Joao Havelange, cuando llegó la entrega de medallas del salto con pértiga, que ganó el brasileño Thiago Braz da Silva.
PUBLICIDAD
El concurso del día anterior fue movido porque durante el duelo Da Silva fue ovacionado y el francés recibió silbidos que influyeron en su concentración.
En caliente, Lavillenie soltó estas palabras: “No es una buena imagen para los Juegos. Yo no le he hecho nada a los brasileños». En 1936 el público también estaba contra Jesse Owens. No hemos visto eso desde entonces».
Posteriormente, Lavillenie pidió disculpas “por una comparación fuera de lugar hecha en un momento caliente y sin medir las consecuencias”.
Pero el público brasileño no le perdonó, pese a que Thiago Braz da Silva pidió palmas para el francés. Hubo abucheo, Lavillenie lloró.