Vapor y agua es lo único que deja a su paso el primer tren de hidrógeno en entrar en servicio comercial en el mundo.
PUBLICIDAD
Presentado este lunes en la pequeña ciudad de Bremervörde, en Baja Sajonia, al norte de Alemania, los primeros pasajeros del tren Coradia iLint apenas notarán un leve gemido del motor y el sonido usual de la fricción de las ruedas sobre los rieles.
"Solo los frenos de aire, que son tan ruidosos como los de cualquier otro tren, son notables", afirmó Daniel Cooper, editor del sitio de tecnología Engadget, que estuvo a bordo de un prototipo de este modelo en una pista de pruebas.
Dos trenes azul brillante Coradia iLint, construidos por el fabricante francés de TGV Alstom, comenzaron a recorrer una ruta de 100 kilómetros entre los pueblos y ciudades de Cuxhaven, Bremerhaven, Bremervoerde y Buxtehude, en el norte de Alemania.
Este recorrido es cubierto de manera usual por trenes de combustible diésel.