Desde este 13 de noviembre 2017, los importadores pagan USD 0,10 centavos más por producto, que corresponde a la Tasa de Servicio de Control Aduanero (TSCA).
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Esta medida se debe a una resolución del Servicio Nacional de Aduana del Ecuador (Senae) y se aplicará a todos los productos que ingresen al país con excepciones específicas como: artículos personales del viajero, ayudas técnicas, donaciones o envíos de socorro.
Para los empresarios “la tasa arancelaria es perjudicial para el comercio y la ciudadanía en general”, así lo señaló Gabriela Uquillas, asesora en temas aduaneros de la Cámara de Comercio de Guayaquil.
Según los empresarios, el nuevo incremento afecta directamente al bolsillo de los ecuatorianos.
Por ejemplo, en el caso de los electrodomésticos los consumidores pagarían un 20% más de lo que actualmente se paga en el mercado y en el caso de los productos de higiene hasta un 10% más.
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Y es que no solo sería la sumatoria de los 0,10 centavos por producto, sino que para determinar la nueva tasa se toma en cuenta tres datos: el peso neto de la mercancía por cada ítem (en gramos), la unidad de control (en gramos) y el valor fijo del servicio de control aduanero por cada unidad importada (diez centavos).
Por ello y en busca de frenar el cobro de la nueva tasa, la Cámara de Comercio de Guayaquil (CCG), en conjunto con los representantes de las Cámaras de Industrias y Construcción, presentaron el 11 de noviembre 2017, una solicitud de medidas cautelares para la suspensión de la tasa de control aduanero.
Sin embargo, hasta la actualidad no se conoce la resolución de la jueza Gladys Martínez, quien quedó asignada para esta acción.
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